sábado, 30 de septiembre de 2023

Encuentro de Clubes de Lectura - Sabero (León) y Bibioteca Municipal de Soto del Real (Madrid)

 


El pasado jueves los dos clubes de lectura de la Biblioteca Pedro Lorenzo de Soto del Real (Madrid) nos encontramos con el club de lectura de la Biblioteca Silvino Fernández de Sabero (León).

El encuentro fue organizado por nuestro director y bibliotecario, Juan Sobrino y por los integrantes del grupo de lectura de Sabero que tuvieron la amabilidad de desplazarse hasta Soto del Real.

El libro que pusimos en común fue Apegos feroces de Vivian Gornick que ya habíamos leído en nuestros grupos. En lo que se refiere a nuestra reunión del club de lectura que coordino, puedes leer un resumen de esta lectura aquí.

Fue una tarde muy grata, en la que no sólo hablamos de Gornick, también de las dificultades por falta de infraestructura de los grupos de lectura de las pequeñas zonas rurales y cómo solventan quedar aislados por la nieve o ampliar progresivamente los integrantes del club por el tamaño de sus poblaciones.

Apegos feroces de Vivian Gornick, coincidimos una vez más, es una lectura en cierto sentido difícil, que para algunos asistentes tenía reflejo en su vida personal, ya que las relaciones madre-hija transitan en ocasiones con dificultad por emociones y sentimientos ambiguos.



Soto del Real, Madrid.

Sabero, León.









jueves, 21 de septiembre de 2023

Las enfermedades mentales son también una consecuencia de este capitalismo - Realismo Capitalista de Mark Fisher - Entrevista a Virginia Baudino, socióloga

 

Virginia Baudino en su intervención en la Mediateca Pablo Iglesias (Alcobendas, Madrid) 


Mark Fisher se ganaba la vida como profesor y escribía un blog, K-Punk que muy pronto se convirtió en un referente sobre el capitalismo y la cultura actual. Las enfermedades mentales, argumentó, son producto del trabajo precario y de un sistema que imposibilita pensar en toda alternativa, en imaginar cualquier otro futuro posible. 

Virginia Baudino García es socióloga y gran conocedora de la obra de Mark Fisher. En esta entrevista habla sobre la aportación de este outsider del pensamiento. Las ideas de Fisher concebidas y divulgadas a través de una vía inédita, un blog, tienen sin embargo, cada vez más presencia quizá porque paradójicamente sólo en el margen de lo académico es en donde pueden escribir y publicar pensadores interesantes. 

En unos meses en Madrid podremos asistir a un encuentro dedicado a Mark Fisher, será en el Centro Cultural Conde Duque, el próximo 24 de mayo de 2024 bajo el lema, "qué (nos) está sucediendo y cuáles son las posibles formas de desviarnos del «realismo capitalista» en el que vivimos, así como de su eventual futuro". 

Fisher ha sido publicado en español por Caja Negra editores


Quién era Mark Fisher.

Virginia Baudino- Es uno de mis escritores preferidos. Inglés, nacido en 1968, por lo que me es contemporáneo, y aunque terminó con su vida en 2017, me atrae porque leo a alguien que está analizando un contexto que me es conocido, con las herramientas que me son familiares. Filósofo y crítico cultural, para algunos; otros, lo describen como un filósofo pop melancólico. Su obra, dice Laurent de Sutter es pop-filosófica. Fisher perteneció a una generación que comenzó a apoyarse en los instrumentos informáticos para, al margen de las instituciones académicas, crear otras vías de comunicación con los lectores. Es uno de los primeros en difundir sus ideas a través de su blog K-punk. El nombre de su blog dice mucho sobre su mirada crítica. 


Qué ha aportado, por qué hay que leerle.

Fisher analiza a fondo, los estados del capitalismo de principios del siglo XXI, a través de sus objetos culturales como son la música, el cine, las series de televisión, para así elaborar un diagnóstico del malestar o de las patologías de la cultura capitalista. A este capitalismo del siglo XXI le llamó Realismo Capitalista. 

En su primer libro Realismo capitalista ¿No hay alternativa? (Editorial Caja Negra): condensa, para mí, sus hipótesis fundamentales. Para Fisher, post crisis del 2008 y pre-covid, en el capitalismo actual confluyen la precarización del trabajo (especialmente con la derrota de la clase obrera durante el gobierno de Margaret Thatcher y la caída del socialismo), la cultura de consumo, la expansión de los mecanismos de control y un aumento exponencial de las enfermedades mentales que permiten eternizar al capitalismo que "se ha convertido en una cosa plástica, capaz de absorber cualquier cosa con el que tome contacto". 

El malestar es producto del sentimiento generalizado de que no hay nada nuevo: "¿cuánto tiempo puede subsistir una cultura sin el aporte de lo nuevo? ¿Qué ocurre cuando los jóvenes ya no son capaces de producir sorpresas?" se pregunta Fisher, "una cultura que solo se preserva no es cultura." De ahí la importancia de la frase de Thatcher, "no hay alternativa" que luego toman Slavoj Zizek y Frederic Jamenson para acuñar otra frase que va a guiar el trabajo de Fisher: "¿Por qué somos capaces de imaginar el fin del mundo pero no el fin del capitalismo?

El malestar proviene de la percepción de que no hay futuro y se basa en los análisis de lo que el filósofo Franco Berardi llamó "la lenta anulación del futuro", y de la constante  repetición del pasado. Hemos asumido que no hay alternativa al capitalismo y que no existen relatos alternativos capaces de proponernos nuevos escenarios culturales. Es en la música electrónica donde para Fisher se evidencian más estos síntomas. El capitalismo al haber incorporado TODO ocupa incluso el horizonte de lo que es pensable y añade, "lo que se propone como alternativo a la cultura mainstream, no lo es".


¿Mark Fisher abrió escuela?, en qué autores ha influido.

Más que escuela, creo que Fisher ha dado voz a una generación y cada vez se lee más y está más de actualidad. Por lo pronto, ha dado marco a nuestras reflexiones. Curiosamente, después del 2017, año en el que se suicida, sus trabajos han cobrado una gran popularidad, especialmente entre los jóvenes. Creo que porque denuncia lo que se percibe, esta apatía, esto más de lo mismo, esto de que no parece haber alternativas, y que cuando aparecen discursos aparentemente disidentes, rápidamente son cooptados (normalizados) por el sistema, como lo vemos, por ejemplo, con el feminismo. 

El título del segundo capítulo de Realismo Capitalista es muy esclarecedor de esto: ¿Qué pasaría si todos estuvieran de acuerdo con tu protesta? Tomando las argumentaciones de Zizek sobre la alta difusión del anticapitalismo al interior del capitalismo, Fisher llega a la conclusión de que esto más que agrietar al capitalismo lo refuerza.  El objetivo del movimiento anticapitalista no era erradicar el capitalismo, escribe, sino solo mitigar sus excesos. Cambia las palabras 'movimiento anticapitalista' por otras y verás que el resultado es el mismo. Y a mí me parece absolutamente acertado.




Por qué te fascina Mark Fisher.

Porque es brutalmente actual. Fisher es el autor que, para mí, disecciona al milímetro este sistema y su eficacia con los objetos culturales que lo alimentan y perpetúan. No tiene reparos en ir hasta el fondo, tanto que finalmente no le queda más que terminar con su vida. 

Cuando llegas a esas profundidades en el análisis, a mí me parece que es muy difícil seguir. Su segundo libro Los fantasmas de mi vida: escritos sobre depresión, hauntología y futuros perdidos (2013) es interesante porque muestra estas reflexiones personales atravesadas por un análisis cultural a mi parecer, indispensable.


Mark Fisher es editado en español por Caja Negra, una editorial Argentina, ¿a qué crees que se debe que sea precisamente en Argentina? 

En Argentina hay una especie de fascinación, creo, por estos escritores que salen del camino académico y políticamente correcto. Me refiero a Fisher, al coreano Byung Chul-Han, al sociólogo francés Didier Eribon que viven un éxito muy interesante porque, en mi opinión, hacen abordajes teóricos atravesados por lo que Eribon denomina: un socio-auto-análisis. Es decir, ponen también en el centro de sus aproximaciones, su biografía, su historia, sus pertenencias de clase, sus malestares como parte constitutiva de una elaboración más compleja que excede al individuo.

Hay que tener presente que cada uno a su manera, hacen un abordaje filosófico y político de este sistema, pero también de su historia personal. Aunque me gustan muchísimo estos tres autores, Fisher me parece, no sé a nivel teórico pues necesitaría tener más herramientas para dar más peso a esta opinión, que se mueve por fuera del normalizado ámbito académico y bucea en la cultura popular de su época. Prefiero que usen herramientas de reflexión como la música que escucho o el cine que veo que trabajos filosóficos complejos y poco accesibles para alguien que no es especialista en el tema.



Mark Fisher o Naomi Klein sitúan al lector en “ahora que lo sabes”. Fisher acabó trágicamente con su vida, cuál es nuestro mecanismo de protección frente la potencia de las ideas de autores como ellos.

Esta es una pregunta trascendental para mí. ¿Cómo hacer para protegerte? Creo que hay múltiples respuestas y no solo una. Reconstruir pieza a pieza los casi inexistentes lazos de solidaridad con los otros. Compartir las lecturas y reflexiones, así como las búsquedas. Participar en espacios de disidencias, aunque con Fisher sabemos que no son lo que creemos que deberían ser. Leer. Andar en bicicleta. Explorar. Intentar salir de los carriles tradicionales de vida, del tipo de trabajo y de consumo. ¿Es posible? No lo sé. Aún ando buscando esta respuesta. Creo que algunas personas sí tienen más herramientas para hacer frente a la desesperanza.  



«Mark Fisher después de Mark Fisher. Lecturas. Imágenes y Ritmos para una nueva (des)composición del Mundo». Martes 28 de mayo de 2024, 19.30h. - Entrada libre previa descarga de invitación una semana antes de la actividad.

Caja Negra Editores. Fundada en Argentina en 2005 por Diego Esteras y Ezequiel Fanego, Caja Negra es una editorial independiente con sedes en Buenos Aires y Madrid que distribuye sus libros por Latinoamérica y España.


Sigue leyendo la serie de entrevistas a Virginia Baudino, socióloga.


La meritocracia es una trampa - Regreso a Reims, Didier Eribon 

Una sociedad profundamente cansada - Byung-Chul Han, La sociedad del cansancio.  



 


lunes, 18 de septiembre de 2023

Una celebración del teatro - Homenaje a dos grandes dramaturgos - Transoceánica - Griselda Gambaro y José Sanchís Sinisterra, Teatro del Barrio, Festival Surge Madrid


Maribel Orgaz - info@leerenmadrid.com
"Cómo es posible", comenzaba su intervención ayer en el Teatro del Barrio, el dramaturgo José Sanchís Sinisterra, "que sigamos a espaldas del teatro sudamericano. De la dramaturgia argentina, chilena, colombiana, de una autora como Griselda Gambaro". Y mostrando la edición en Cátedra de dos de sus obras,  Decir sí. La malasangre, añadía, "al menos, podemos leer esta edición".

Sanchís Sinisterra y Griselda Gambaro son los dos autores homenajeados en un proyecto singular que traza puentes entre ambos continentes. En primer lugar, en el marco de Celcit en Buenos Aires se estrenó, Transoceánica de Patricia Zangaro en la que Sinisterra y Gambaro se encuentran, pasean y dialogan sobre sus obras. Zangaro es también dramaturga, amiga personal de Gambaro y gran conocedora de ambos autores. "El problema era evitar sketches", reflexionaba Sinisterra.

Y después de Buenos Aires, es el turno de Madrid, con dirección de Cristina R. Cejas, y producción de la compañía Vuelta de Tuerca, se estrenará en la Sala Mirador el 29 de septiembre, dentro de Surge Madrid: Transoceánicas, decir es hacer

"Aquí, ambos imaginan su encuentro", explicaba la actriz Leticia Pascual en la presentación que tuvo lugar ayer en el Teatro del Barrio junto a Sinisterra. Transoceánica en Madrid estará interpretado por Leticia Pascual y Marta Alonso. 

Griselda Gambaro, cuyas obras han sido estrenadas en distintos países de América Latina, Estados Unidos y Europa y su trayectoria profesional distinguida con la Mención Especial por la Fundación Konex, se adscribe al llamado teatro del absurdo "o incluso de la crueldad, en el que profundiza en la relación entre víctima y victimario. En el que lo grotesco y lo siniestro llegan a través de lo familiar", explicaba Sinisterra. El llamado sainete porteño o grotesco criollo de Armando Diescépolo sería una de sus grandes influencias. 

"Nunca nos encontramos personalmente y eso a pesar de que yo estaba en Barcelona en los años setenta, que fue cuando Griselda se instaló allí como exiliada", Sinisterra. "Es también algo que tenemos en común, además del exilio, un pasado de represión".

Sanchís Sinisterra es uno de los más grandes dramaturgos españoles, "fuente inagotable de sabiduría teatral", autor de más de cuarenta textos teatrales, traducida a más de veinte idiomas, ha recibido el Premio Nacional de Teatro en 1990, el Premio Nacional de Literatura Dramática en 2004, y el Premio Max al Mejor Autor en dos ocasiones.

Por su parte, Griselda Gambaro ha sido distinguida con el Doctorado Honoris Causa del Instituto Universitario Nacional de Arte (IUNA) y galardonada en varias ocasiones. Novelista además de dramaturga, cuenta con una extensa obra literaria. "Una verdadera iluminadora", en palabras del dramaturgo argentino Mauricio Kartun. 


Festival Surge Madrid. Transoceánicas, Decir es hacer.
Dirección, Cistina R. Cejas
Reparto: Marta Alonso y Leticia Pascual





lunes, 4 de septiembre de 2023

Carecemos de nuevas formas de contar la historia del mundo - Juan Cueto, Fundación Juan March y Olga Tokarczuk, Premio Nobel de Literatura 2019

 



Maribel Orgaz - info@leerenmadrid.com
La novela, y el cine no son los géneros en los que ahora se reconoce una sociedad. "La novela moderna que se inaugura en el siglo XIX con Balzac, Flaubert, Clarín o Galdos, era el medio de prestigio, un vehículo de ideas", reflexionaba Juan Cueto en un ciclo de conferencias en la Fundación Juan March titulado Comunicación y Cultura

La novela del siglo XIX, el denominado realismo literario nació como nueva forma de reflejar lo que estaba ocurriendo en ese momento, "introdujo el presente en la literatura". Era una técnica antes que otra cosa. "Ahora, los escritores han desertado de la realidad y el cine es un ejercicio de nostalgia que ejerce su poder desde el pasado. Antes el Monte Olimpo era Hollywood y la televisión no era una competencia".

El ciclo de presentaciones Cultura y Comunicación tuvo lugar en 1985 y continúa asombrando por su vigencia. 

"Contaré una anécdota, una gran editorial italiana me pidió 15 escritores españoles para una colección de narrativa española. Al cabo de dos meses, me contestaron perplejos que eran obras muy bien escritas pero ninguna sobre la realidad, que no había presente en sus novelas, no se desarrollaban en la ciudad, se referían al pasado y no había marcas que proporcionaran información sobre los protagonistas, su situación social, y el contexto en el que vivían". 

Juan Cueto, periodista, escritor, director de cadenas de televisión trazaba, en cuatro sesiones, una teoría acerca de los cambios profundos que las nuevas tecnologías habían provocado en nuestras sociedades y en nuestra cultura: "ahora los factores decisivos en nuestra vida cotidiana son la velocidad, la invisibilidad, la universalidad y la complejidad. "Pero el factor clave es la velocidad". 

Ni el cine ni la novela han sabido adaptarse a ella. "En la guerra no se trata de armas que destruyan más, sino que alcancen a más velocidad al enemigo; en el ocio no se trata de exhibir casas y ropas, se trata de exhibir velocidad, de consumir tiempo, poseer aviones y yates, de viajar más".

"El verdadero poder ahora no es dominar el territorio, los bienes tangibles, las herencias de privilegios familiares es poseer tiempo". 

Novela y cine son lentísimos, desde que se escriben o filman hasta que salen al mercado "las cosas ya han cambiado".

La biotecnología, la investigación en I+D, la informática, los ordenadores; en definitiva, las nuevas tecnologías han  configurado una tercera cultura que participa del humanismo y la ciencia; vivimos en una mutación científica y técnica sin parangón. "¿Son por sí solas el motor del cambio o forman parte de algo más", se preguntaba.

Los relatos lineales, comienzo, desarrollo y final, a través de los cuales una novela y una película reflejaban y proporcionaban una idea de progreso: avanzamos en línea recta en un proceso acumulativo de mejoras, no sirven. Esta forma de simular la realidad, al fin y al cabo de intentar conocerla, está obsoleta en nuestras sociedades hipertecnológicas en las que la ciencia predomina sobre las humanidades.

"La ciencia tiene un poder que no ha tenido nunca", afirmaba Cueto, y los habitantes occidentales del siglo XXI que han permanecido dos años bajo la distopía de un virus no pueden más que corroborar sus palabras. 

La ciencia, según las idea de Cueto que beben de las lecturas de Paul Virilio, Alvin Toffler o el informe Nora-Minc como él mismo cita; nos ha dado otra idea de progreso: nada comienza de manera absoluta, nada se desarrolla de manera lineal, nada finaliza rotundamente."

"El verdadero progreso real y actual sería la adquisición de nuevas estructuras mentales que permitan simular más eficazmente la realidad".

La sociedad había tomado la idea de progreso lineal desde las humanidades,  desde la narrativa oral y después lo había cristalizado en la escritura a través de la novela y de la narrativa visual en el cine. Ambos eran, según Cueto, una forma, una técnica. "Quizá en el Arte y la literatura las historias lineales puedan seguir funcionando", aventuraba.

En 2019 se concedió el Premio Nobel de Literatura a la escritora polaca Olga Tokarczuk  "por su imaginación narrativa con pasión enciclopédica que representa el cruce de fronteras como una forma de vida".

El discurso de la escritora es la continuación de las reflexiones que en los años ochenta daban lugar a algunos libros y discusiones públicas de algunos autores como Juan Cueto. Algunos hay que insistir, una minoría. 

 A lo largo de sus intervenciones, Cueto ironizaba sobre los temas sin interés y de hermandad en los que estaban inmersos tantos de sus compatriotas y lo achacaba a que "renovarse exige codos". En ocasiones se preguntaba por qué la discusión pública en España estaba al margen de lo que podía leerse y escucharse en Francia y Estados Unidos. 

"Carecemos de nuevas formas de contar la historia del mundo", afirmaba la premiada Olga Tokarczuk. La literatura parece incapaz de abandonar sus estereotipados moldes y se están convirtiendo en algo marginal en comparación con otras formas de narración. La imagen y la transmisión directa de la experiencia, la fotografía y la realidad virtual, serán una alternativa viable a la lectura tradicional. 

La Nobel polaca se pregunta qué lugar puede ocupar la literatura en un mundo complicado, con miles de interconexiones que no somos capaces de ver, de contextos múltiples, de hechos contradictorios y mutuamente excluyentes. "Sueño con un narrador, una cuarta persona que no es una construcción gramatical". 

La realidad es atendida por los medios de comunicación, las redes sociales e  Internet pero en la literatura carecemos de  narraciones para el ahora concreto, para las transformaciones ultrarrápidas del mundo de hoy. 

Tokarczuk se pregunta qué sentido tiene insistir, quizá porque nos tranquilizan por conocidas, en las formas de narrar del pasado. Narrar desde el yo es un punto de mira estrecho. 

Instalado en uno mismo, "te voy a contar la historia de mi familia, te voy a contar dónde he estado (...), se carece de la dimensión de la Historia". 

Los territorios de la imaginación de las masas, en palabras de Juan Cueto, "se han repartido" refiriéndose a la televisión devorando al cine aunque no llegó a ser testigo del siguiente paso, las series que han influido de manera revolucionaria en contar "la historia del mundo".

Este proceso de estetización imparable ha dado lugar a que la novela cediera al cine, estetizándose, y éste se estetizara con la aparición de la televisión que a su vez gracias a Internet ha dado paso a las series. 

Para el escritor Ricardo Piglia, el blog tuvo el mismo proceso de estetización cuando aparecieron las redes sociales. K-Punk de Mark Fisher, Club Orlov de Dmitri Orlov o The marginaliam de María Popova son buenos ejemplos. 

"La serie se inscribe en el ritmo nuevo, prolongado y desordenado del mundo, en su comunicación caótica, su inestabilidad y fluidez. Esta forma de contar historias es probablemente la que más creativamente busca una nueva forma hoy", Olga Tokarczuk.

Qué lugar puede tener la literatura que necesita de la lentitud, la atención y la concentración, habilidades cada vez más raras en un mundo complejo y veloz, dominado por Internet, las redes sociales y falsas noticias que han hecho perder la confianza de los lectores en la ficción. "No es la imagen la que se opone al texto, es una dimensión diferente del mundo que actúa sobre nuestros sentidos".

La escritora polaca se plantea al igual que hacía Juan Cueto casi cuarenta años atrás esta misma cuestión pero a diferencia de él, ofrece una posible respuesta: la literatura es la que nos mantiene cerca de los hechos del mundo, se enfoca en el razonamiento interno y los motivos de los personajes. Solo la literatura nos permite profundizar en la vida de otro ser, comprender sus razones, compartir sus emociones y experimentar su destino. Quizá una historia es una forma de organizar una cantidad infinita de información dentro del tiempo.

La obra de Olga Tokarczuk es un intento de asociar hechos y buscar orden, de conexiones inesperadas. La realidad es mucho más complicada de lo que la humanidad había imaginado y no somos más que una parte pequeña de esos procesos.

“Ha llegado el momento de mirar el mundo desde otras perspectivas, incluidas las no humanas”, afirmaba la escritora española Irene Solá en una entrevista reciente. 

"Cuando escribo tengo que sentir todo dentro de mí. Tengo que dejar que los seres vivos y los objetos me atreviesen, todo lo que es humano y más allá del ser humano. Todo lo que está vivo y lo que no está dotado de vida". Olga Tokarczuk. "Creo que se deben contar historias como si el mundo fuera una entidad viva y única, formándose constantemente ante nuestros ojos, y como si fuéramos una parte pequeña y al mismo tiempo poderosa en él".



viernes, 1 de septiembre de 2023

Escritoras españolas contemporáneas - UP Miguel Delibes, Alcobendas (Madrid) - Profesora de literatura, Maribel Orgaz - Comienzo, 2 de octubre.

               

Este próximo 2 de octubre comenzaré a impartir un monográfico sobre escritoras españolas contemporáneas en la Universidad Popular Miguel Delibes de Alcobendas (Madrid) en la que soy profesora de literatura.

Cada año imparto uno o dos monográficos que han incluido los Premio Nobel de Literatura, Benito Pérez Galdós, Miguel Delibes, el Centro del Margen (subgéneros literarios), la Literatura de la posguerra española, Una novela, una ciudad o Una mujer, una obra; entre otros.

Este próximo curso haré un recorrido sobre algunas de las escritoras españolas actuales que incluirán autoras de novela negra como Alicia Giménez Bartlett o Rosa Ribas; las sorpresas editoriales de Panza de burro de Andrea Abreu o Canto yo y la montaña baila de Irene Solá, superventas como María Dueñas o Elizabeth Benavent y otras de larga trayectoria como Pilar Adón, Marta Sanz y Sara Mesa.

En ciencia ficción, hablaré sobre Elia Barceló y la quizá menos conocida, Cristina Jurado. Una sesión estará dedicada a las poetas, desde Amalia Iglesias al proyecto Torremozas Editorial y repasaremos ensayos que han marcado un antes y un después como El entusiasmo precariedad y trabajo creativo en la era digital de Remedios Zafra.

Haremos salidas y habrá invitadas a nuestro aula.  El curso está completo.


Amanece en el tren. Un rumor de raíles desata

la cremallera de un paisaje. El cielo abre sus

párpados, instante en que no sabes si acabas de

partir o estás a punto de llegar. No sabes si

el mundo huye de ti o eres tú velocidad de fuga

entre sus fauces. Te abandonas al presagio de una

selva lejana, esperas el placer de su espesura.

      Amalia Iglesias







Puedes leer sobre los monográficos impartidos con anterioridad: 

                       Calles que quedan fuera de la historia - La Barcelona de Javier Pérez Andújar


                      El Aranjuez de José Luis Sampedro

                      Y entonces, apareció Galdós               

                      Galdós, encolerizado