lunes, 24 de mayo de 2021

Cómo proceder ante la abundancia - Tres formas de atravesar un río, Agustina Atrio

Para acercarse a un río, detalla la escritora Agustina Atrio, hay que arrastrar los pies al entrar al agua "para no pisar una raya que pudiera enojarse y clavar su aguijón"; no adentrarse en "los camalotes" por si hubiera víboras; no tirarse al agua sin antes tantear la la profundidad "con un remo o con un palo". Estos comportamientos fluviales allá en su tierra natal, aclara, "son transmitidos de generación en generación".

Atrio es autora de un pequeño libro, Tres formas de atravesar un río, quizá crónica, quizá narración, del viaje desde su Paraná natal (Rosario, Argentina) hasta su nuevo destino: el río Limago (Suiza) dejando atrás el Manzanares (Madrid, España).

"¿Cómo influye la geografía en nuestra forma de nombrar?, se pregunta a lo largo de esta hermosa reflexión acerca de la migración, los lugares marcados por la sed o el trópico y cómo haber crecido en la abundancia encamina sus pasos, de las aguas dulces que transcurren durante infinitos kilómetros, de los ríos navegables a vela de su Argentina natal a los domesticados manzanares europeos. 

Horacio Quiroga y su deriva, Claudio Magris y su Danubio. Los ríos de allá que ocupan y desbordan con su gran caudal y sus peligros tragándose escritores y destinos frente a los europeos obstruidos, achicados por culturas, encauces, usos. Y de la misma manera, de la narración se apodera esta geografía de la abundancia o la escasez. Un Paraná arrastra las palabras con su fuerza mientras que un Sil apenas emerge en esta crónica sepultado bajo cientos de años de historia. Ya sea Alemania o España o Suiza, la dimensión marca la narrativa del viaje: "en Madrid más que conectarme con lo acuático me aproximé a lo terrestre, practicando el arte de caminar".


Y de esta manera, fue precisamente en Madrid, en donde Agustina Atrio comenzó su otro gran proyecto, Despaseando, "para vivir las ciudades que habitamos". Una ciudad en la que logró una mezcla de lo que quiso ser y finalmente, pudo ser. Un lugar donde perderse sin encontrar a nadie.

Es probable que las ciudades, continúa Atrio, puedan conocerse de la misma manera que su río natal porque han de abordarse con atención, evitar sus lugares más inciertos y antes de anegarse en ellas y lograr salir a flote, tener presente las palabras de Magris: "adquirir otra identidad consiste en enriquecer a la persona con un alma nueva no de tracionar a la primera".

 

Tres formas de atravesar un río de Austina Atrio forma parte del proyecto de Ediciones Menguantes sobre mujeres viajeras. Hasta el momento se han editado otros dos títulos: La pureza de Ruth Miguel Franco y  El año que no viajé a Buenos aires de Saray Encinoso Brito.

De Menguantes y sus cuidadas ediciones puedes leer otra referencia, Breve atlas de los faros del fin del mundo






viernes, 21 de mayo de 2021

Escribir es igual que cantar - La poesía ha vuelto a Madrid - III Edición de Yoga para koalas en Nanai, Barrio de Malasaña

 

Humanos y esquejes de pez, en las divertidas palabras de Sergio Artero, habíamos reservado días antes el aforo completo en Nanai para escuchar la III Edición de Yoga para koalas. Un espectáculo de poesía y música repleto de humor y entusiasmo.

El poeta argentino Diego MatturacoGonzalo Escarpa de La Piscifactoría y Sergio Artero, Saltatium Teatro, que vendrá a impartir una sesión del ciclo de Talleres poéticos que coordino para las Mediatecas de Alcobendas, abrieron de nuevo en Madrid, en el Barrio de Malasaña, una tarde para la poesía y ser "a ratos ñandú, a ratos ballena"

Tras el pánico provocado por un virus que nos paralizó la vida; ha vuelto con el mismo interés y pasión en los madrileños escuchar poesía declamada, recitada, cantada y si se les anima, hasta corearla. 

"Ser koala es muy difícil", declamaba Sergio Artero porque "para entender el Arte hay que entender el fuego". 

Tras ellos y como poeta invitada Emilia Conejo, el contrapunto a los versos festivos, paródicos y teatrales de los tres koalas. "De la laguna del niño se escucha un leve gemido nenúfar, como de dragón durmiente". 

Al finalizar hubo también una sorpresa: el rap de Celia Bsoul: "renuncio al corazón si a cambio tengo calma". La rabia y el dolor de esta música, "ahora es verano pero invierno en mi memoria",  que encajona la palabra en una estrecha estructura rítmica tiene en la hermosa voz de Bsoul, que intercaló el francés y el español en una amalgama hipnótica, un bello contraste: 

"todo va bien si no despiertas, 

cierra la puerta". 

"¿Viniste por el agua o por la sed?"

"Si nada es suficiente

entonces es que nada es importante".



  

miércoles, 19 de mayo de 2021

Un soneto es una cumbre - Fidel Sendagorta, escritor y poeta

 

Fidel Sendagorta, de profesión diplomático, ha estado destinado en las embajadas de España en Japón, en Cuba y en Marruecos así como en la Representación Permanente ante la Unión Europea en Bruselas. Ha sido embajador en Egipto y actualmente es director general de política exterior y seguridad en el Ministerio de Asuntos Exteriores. Su escritura incluye la poesía y el ensayo. Como poeta es admirador de San Juan de la Cruz y de Juan Ramón Jiménez. El motivo de esta entrevista es la publicación de su segundo poemario en el que se estrena como sonetista, Jardines del tiempo. "Un jardín es un pequeño paraíso", afirma, "y no se trata sólo de los físicos, de los reales, también de los imaginados".  Su primer poemario se tituló Décimas de Zamalek y fue publicado en 2013. 

Jardines del tiempo, tu nuevo poemario escrito en sonetos.

Me gusta la rima y su extraña alquimia de los números con las palabras. Escribí mi primer poemario en décimas y esto me dio confianza para probar a ascender cumbres mayores, como lo son los sonetos. Una forma que se ha utilizado desde hace siglos en tantos idiomas es porque tiene una fuerza especial. A mí, además, me sirve para disciplinarme como escritor y me obliga a decir lo que quiero decir en exactamente catorce versos.

Cuál es tu evolución de tu escritura poética desde el anterior, Décimas de Zamalek a Jardines del tiempo.

En Décimas de Zamalek había una indagación sobre Egipto pero también un territorio muy amplio en el entraban el amor, la amistad, el tiempo y la muerte. En Jardines del tiempo hay una fuente de inspiración principal que es la naturaleza y, en relación con ella, hay una indagación sobre nuestra relación con lo divino. Ahí aparece el destino, la fortuna y la providencia. Y el misterio que junta a los tres. Misterio que nunca está lejos del amor y de la muerte. 

Si la poesía es intensidad, ritmo y voz. Qué es la Voz.

Para mí la voz es ese tono personal que hace que un poema tenga un estilo inconfundible. No creo que la originalidad sea el valor máximo en el arte pero incluso dentro de una misma tradición hay voces muy variadas que enriquecen al conjunto creando una impresión coral.

La poesía llena auditorios y hasta se paga entrada por escucharla. A qué crees que es debido.

Yo he visto en Cuba teatros llenos para escuchar a un poeta o a varios. Creo que en otros países latinoamericanos sucede otro tanto pero no me consta que sea el caso de España. Me parece que al otro lado del Atlántico la palabra está muy viva y la gente quiere conmoverse con ella y compartir ese momento emocionante, casi como si fuera una ceremonia religiosa. En España, en cambio, veo que la lectura poética es una actividad más privada, más íntima. Debo decir que me da envidia ese fervor del público latinoamericano.

Como poeta, cuál crees que es el principal inconveniente hoy en día, para la labor poética.

Las canciones atraen la atención de una inmensa mayoría de jóvenes que se saben de memoria las letras de sus temas favoritos. Esas letras son poéticas pero al público actual le cuesta leer poemas a palo seco, sin el acompañamiento de la música. Algunos poetas han buscado la conexión con ese público escribiendo letras para músicos de rock, como Luis Alberto de Cuenca con la Orquesta Mondragón y Loquillo. Y algunos cantantes les ponen música a poemas, como esa inolvidable versión de La plaza de José Bergamín por Enrique Morente.

Qué poetas consideras tus referencias.

Yo he sido muy lector de San Juan de la Cruz, que, por cierto, es el poeta español más leído en el mundo hasta Lorca. Y su obra ha sido una inspiración de no pocos sonetos de Jardines del tiempo. Pero desde hace años en mi mesilla de noche está la poesía completa de Borges y leo y releo sus sonetos con un enorme placer. Lo que no estoy tan seguro es de su influencia sobre mi escritura. En todo caso, siempre vuelvo a TS Elliott, a Jorge Guillén, a Eliseo Diego, a Sor Juana Inés de la Cruz, a Pessoa, a Quevedo, a Lope, a Octavio Paz y al Juan Ramón de Animal de fondo.


miércoles, 12 de mayo de 2021

Camino del asombro, en ruta por las letras - Festival Internacional de Literatura de Castilla y León - Del 18 de junio al 4 de julio

 

                                                Fotografía del Camino del Asombro, Segovia

Castilla y León ha dado en el clavo. Antes de la gran estampida a las vacaciones de playa y al extranjero, propone una turné literaria por su comunidad: recorrer del 18 de junio al 4 de julio cada una de sus provincias para asistir a una conversación, conocer una propuesta gastronómica o sorprenderse con un encuentro insólito entre escritores en un palacio renacentista, en una catedral, en un castañar o en un castillo templario.

Los aforos ínfimos por el virus hacen temer que sea casi imposible asistir a lo que Peridis, Anna Caballé, Najat el Hachmi o El Roto tengan que contarnos pero cuando el visitante se encuentre ante el pórtico de la Catedral del Burgo de Osma en Soria o la fortaleza templaria de Ponferrada en León, se dirá que, sin duda, mereció la pena ir hasta allí.

Más de cien autores, más de doscientas actividades, premios nacionales de literatura, académicos de la RAE, actores y dibujantes componen un programa que busca atraer al mejor turista, el de mayor poder adquisitivo, el más respetuoso con su entorno y el mejor prescriptor: el turista cultural, a cada una de sus provincias. 

La Junta se vino a Madrid, al Instituto Cervantes a la gran presentación del Festival porque Madrid es un gigantesco emisor turístico y es aquí en donde se alcanza con más facilidad la proyección internacional de cualquier evento. Castilla y León tiene en la enseñanza del español una de sus fuentes de riqueza y es un motor que cuida con esmero. Desde la Universidad de Salamanca, la tercera más antigua de Europa, al Hay Festival que este año se celebrará en septiembre; la estrategia cuna del español es un emblema de cualquier gobierno autonómico, sea del partido que sea. 

El programa del I Festival Internacional de Literatura de Castilla y León aún no ha sido publicado en detalle pero se han avanzado las principales fechas y lugares:

Del 18 al 20 de junio. Valladolid (18 de junio), Ávila (19 de junio) y Soria (20 de junio), donde se abordarán temas como los orígenes de la novela, de la mística y los orígenes e inspiración de la poesía moderna.

Del 25 al 27 de junio. Segovia (25 de junio), Zamora (26 de junio) y Palencia (27 de junio), se tratarán los orígenes del movimiento comunero, los orígenes judíos y musulmanes y el origen del Medievo.

Del 2 al 4 de julio. León (2 de julio) se dialogará sobre los orígenes del gótico; los orígenes de la especie en Burgos (3 de julio), y los orígenes de la picaresca en Salamanca (4 de julio).

Se debatirá sobre la obra de escritores como Santa Teresa, San Juan de la Cruz, Antonio Machado y Miguel Delibes, entre otros.

Y habrá proyectos transversales a través de espacios insólitos de las nueve provincias, recorridos literarios por el Camino de Santiago o rutas gastro-literarias, como los orígenes de la legumbre o el vino. Más información aquí.



lunes, 10 de mayo de 2021

He escrito contra viento y marea hasta lograr la belleza - Noemí Valiente, escritora

Noemí Valiente publica nueva novela que sale hoy mismo a la venta, El mismo azul. La historia de una amistad a través del tiempo, de los errores que marcan la infancia y de las obsesiones que sirven como brújula vital. Su primera novela publicada Encuentros con la casualidad  y el cuento infantil María coletas marcaron un antes y un después en su trayectoria como escritora. "Reconozco", explicaba en una entrevista, "que mi obsesión es la escritura". 

Publicas nueva novela, El mismo azul ambientada en Lisboa.

La novela tomó forma en un viaje a Lisboa. Había una idea ya previa de la historia desde el año 2009 y sobre todo tenía claro los temas de los que quería hablar. Fue en este viaje a Lisboa, en febrero de 2011, cuando la historia cogió alas. La atmósfera de Lisboa era perfecta para narrar el reencuentro de Poly y Guiomar. El marco idóneo para esas “travesuras” de adultas que suponen una buena parte de la novela. 

Doy mucha importancia al lugar donde transcurre la acción porque marca la atmósfera, que es fundamental para envolver al lector y atraparle dentro de la historia. En El mismo azul además, contamos con las fotografías de Manuel Mata, que contribuyen en gran medida a transportar al lector a esta ciudad y dentro de la propia historia. Manuel ha recreado con sus fotografías una Lisboa incluso más hermosa y envolvente que la real. Creo que estas fotos convierten al libro en algo más que una novela, en un objeto artístico y valioso con el que deleitarse estéticamente.

De dónde partió la novela, ¿de una imagen? ¿de querer hablar de una relación de amistad en el tiempo?

Yo quería contar una historia sobre lo vulnerable de la infancia. Los sucesos que ocurren en la niñez, cuando aún no tenemos las herramientas para asumirlos y superarlos, pueden condicionar toda una vida. Es el caso de Poly, la protagonista, que ha pasado toda su vida atrapada en una travesura de la infancia que tuvo consecuencias muy duras para toda la familia y que ella no ha conseguido superar. El título El mismo azul es la metáfora de su obsesión. Lleva veintiún años buscando un tono de azul que quedó anclado en su memoria. De adulta vuelve a encontrar ese mismo azul en los ojos de Guiomar, su antagonista en la novela que con una personalidad totalmente diferente, ha asumido aquella travesura de infancia de otro modo, menos reflexivo y más práctico. Esto es algo que me interesa mucho: cómo un mismo hecho puede afrontarse y vivirse de formas tan diferentes. Creo que es algo a tener en cuenta en nuestra propia vida, por eso la lectura de novelas como esta puede servir de entrenamiento.

También quería hacer reflexionar al lector sobre cuánto de convencional es la vida que vivimos, adaptada a un orden social en el que todos hacemos casi lo mismo. Planteo la pregunta de si no nos estaremos perdiendo demasiadas cosas. Esa forma de vida convencional, representada por Poly, la contrapongo a la de Guiomar, que vive al margen de la sociedad, obsesionada con disfrutar a toda costa. Hay una conversación entre estos dos personajes en el que Giomar le dice a Poly: “Te hablo de la búsqueda de sensaciones. De no pensar tanto y vivir una vida jugosa. Si es que estás dispuesta a divertirte”, que condensa esta idea. Poly representa el orden establecido y Guiomar la rebeldía, la aventura, la transgresión. Poly se va a dejar arrastrar de nuevo por la personalidad de Guiomar y porque vive anclada en su propia obsesión. Eso va a llevar, a Poly pero también a los lectores, a vivir experiencias para las que no todos estamos preparados.

Escribes transitando el público infantil y el adulto. ¿Es la historia quien decide a qué publico dirigirse?

Me gusta tu forma de plantearlo: sí es la historia la que decide. La experiencia literaria va muy unida a la experiencia vital. Mi conexión con mis hijos y con sus intereses es muy fuerte y por eso desde hace unos años escribo sobre todo historias infantiles, como es el caso de María Coletas, que vio la luz en 2019, y otros libros para niños que espero que pronto vean la luz. 

 El mismo azul es una novela para adultos y nada apta para el público infantil. Su germen es anterior a mi primera maternidad. Llevo más de diez años reescribiendo y corrigiendo esta historia porque no podía dejarla a un lado. La historia tenía mucha fuerza en mí, y no me ha abandonado en todo este tiempo. La he escrito contra viento y marea: dos hijos, dos cambios de trabajo… Se sucedían los días dedicada a otras tareas y no tenía apenas tiempo. Sacarla adelante ha sido un ejercicio de fuerza de voluntad, pero creo que es una novela que merecía la pena publicar. Además, cuando una historia persiste tanto en tu cabeza, tienes que contarla, dejarla salir para que deje de ser tuya y pase a ser de los lectores. Ha sido para mí una forma de liberación.

Crees que la promoción es ahora parte fundamental de la escritura, a diferencia de antes que era lograr publicar.

La promoción es fundamental. Se publica mucho y las novelas “caducan” en muy pocos meses, casi semanas. En este caso, además, hay un trabajo magnífico de fotografía y una edición de una calidad impresionante que hace que éste no sea un libro de “usar y tirar”. Porque además de la lectura de una historia que atrapa y engancha, el afortunado propietario de este libro puede volver siempre que quiera para deleitarse y recrearse en las maravillosas fotos de Manuel. Cada foto es un disfrute para los sentidos. Sensaciones que van más allá de la propia experiencia lectora. Hay libros que, de un modo especial, merece la pena tenerlos en papel y a mano en la estantería. Éste es uno de ellos.

En tu trayectoria como escritora, cuáles serían los temas que van predominando, tu universo de escritura.

Hay una serie de características que definen mi literatura, o que yo persigo al escribir. La primera es la búsqueda de originalidad: historias que sorprendan o que estén contadas de un modo novedoso. Creo que, como lectores, nos aburre leer siempre lo mismo y valoramos la capacidad de conmocionar y sorprender de la literatura. 

La segunda característica es hacer participara al lector, involucrarle en la historia de un modo activo, no pasivo, para que la experiencia lectora sea más rica. En esa participación a la que yo invito a mis lectores, intento hacerles reflexionar, hacerles preguntas. Hay distintas técnicas de lograr esta participación. En el caso de El mismo azul me he servido mucho de un narrador en primera persona a través de un personaje que es inseguro, indeciso y que va a arrastrar al lector a plantearse ciertas cuestiones y decisiones. Creo que no está en la misión del escritor transmitir una u otra ideología, si no dejar que cada lector busque la suya, la que más vaya con él y para eso intento plantear cuestiones o disyuntivas y reflejar una misma situación desde distintos puntos de vista.

Ya por último mencionaré mi intención de lograr una prosa bella, que difumine las fronteras con la poesía. Trato de narrar con un lenguaje evocador, buscar la belleza en la palabra escrita; es mi humilde intento de mejorar la realidad a través de la literatura.

Qué escritores consideras tus maestros o cuáles serían tu referencia.

Primero citaré a dos autores que son referentes por la forma que tienen de afrontar el oficio de escritor. El primero es Enrique Vila-Matas, lo que escribe conecta siempre con el momento que estoy viviendo. Parece que escribiera para mí. La segunda es Virginia Woolf. Cuando abro uno de sus diarios, ensayos o novelas, tengo que dejar de leer porque me entran unas irrefrenables ganas de escribir.

También quiero mencionar a Espido Freire, que me parece una narradora extraordinaria capaz de llegar a todo tipo de lectores. Además, es una gran maestra. Hice un taller con ella que resultó un punto de inflexión para mí. Ahí descubrí que lograr un buen libro es posible con esfuerzo y constancia. Con ella aprendí a buscar mi propio método de trabajo. Por último, citaré a tres autores contemporáneos que por distintas circunstancias influyen en mi vida, como lectora, como escritora y como persona: Pilar Adón escritora brillante y una gran persona, Antonio Pascual, porque cuando entras en un libro de Antonio ya no quieres volver a la realidad, y Clara Martín, cuya ópera prima Varios disparates y un capricho es una de las novelas más maravillosas que he leído en los últimos años.


Noemí Valiente
 Fotografía, Manuel Mata 
Editorial Cuadernos del Laberinto
 

martes, 4 de mayo de 2021

Literatura Rusa de Ciencia ficción y Teoría de la fuga - Lo que nos falta son más mundos - Liu Cixin, Cádiz y la huida al futuro - "Escribiendo en el centro del margen" por Maribel Orgaz. Curso de literatura, UP Miguel Delibes. Alcobendas (Madrid)

 

Durante este semestre, en la UP Miguel Delibes (Alcobendas, Madrid) y de manera presencial, imparto un curso al que he denominado, Escribiendo en el centro del margen. Un repaso a tres de las grandes literaturas populares: la novela romántica, el género que más vende en todo el mundo; la literatura de ciencia ficción, de pocos lectores pero inspirador de series y películas que atraen a millones de espectadores y el género negro, el único capaz de contar la verdad en nuestras sociedades capitalistas sin la aridez de los ensayos sociológicos. 

En abril, dejamos atrás la denominada ficción especulativa o ciencia ficción, la proyección social de los avances en ciencia y tecnología. Hasta hace poco, un hombre nacía y moría en el mismo mundo pero con la Revolución industrial sobrevino un gran cambio. Hoy en día, el proceso se ha acelerado hasta comprimir en 10 años lo que hasta la Segunda Guerra Mundial podía proyectarse en 50.  

Durante dos sesiones, hemos abordado desde Isaac Asimov a Úrsula K. Leguin, ese extraño en el género que es el polaco Stanislaw Lem o el nihilismo del cyberpunk: la convivencia de alta tecnología y una sociedad de pobres en la que nadie será capaz de imaginar una revolución. 

Hemos resaltado las consideradas mejores distopías del género: Un mundo feliz de Aldous Huxley y El cuento de la criada de Margaret Atwood y reflexionado acerca de la advertencia de la ciencia ficción argentina, según la cual el sistema ha indoctrinado de tal manera al escritor que sólo es capaz de profundizar en su lógica subjetiva sin altos vuelos de la imaginación. "Lo que nos falta", afirmaba Martín Felipe Castagnet, "son más mundos y menos utopías". 

Y antes de terminar nuestras dos clases con la ciencia-ficción china, abordamos la producción de los escritores rusos y españoles, y en éstos, esa peculiaridad que es Cádiz

"Los escritores rusos", explicaba Ricardo San Vicente, profesor de literatura rusa en la Universidad de Barcelona; "se fugaron al futuro". La censura en la Unión Soviética impedía la crítica a través de grandes frisos sociales y ambientaron su narrativa en una vuelta al campo, en héroes aplastados por el régimen zarista, relatos de la Gran Guerra Patria o en la familia y la vida íntima. 

En nuestro país hay un fenómeno curioso. La provincia de Cádiz concentra el mayor número de escritores de ciencia ficción de toda la península. Se ha escrito incluso una tesis doctoral sobre esta peculiaridad, La ciencia ficción en Cádiz por Marco Antonio Marcos Fernández, también autor de varias novelas del género. Desde el prolífico Ángel Torres Quesada a Rafael Marín, el internacionalmente conocido Félix J. Palma, Jesús Cañadas, Joaquín Revuelta, Carmen Moreno o Javier Marcos todos son gaditanos. 

"La ciencia ficción en Rusia", reflexionaba San Vicente en la mesa redonda convocada por la Librería Gigamesh, especializada en el género, "fue fomentada por el régimen porque era un lugar menos ideologizado y difundía optimismo sobre el avance de la ciencia". 

En la España del siglo XIX, la próspera y liberal Cádiz promulgó la primera Constitución y la libertad de imprenta, era el enlace comercial y cultural con Hispanoamérica, su burguesía ilustrada, sus comerciantes tenían conexiones con toda Europa. Esta posibilidad, que era el germen para un cambio de época, fue aplastada por una amalgama de poderes retrógrados: monarquía absolutista, una Iglesia cerril, grandes latifundistas. Pasear por esta ciudad es hacerlo en un trazado congelado en el tiempo como una pompeya arrasada y petrificada.    

Durante nuestra última clase y al hilo de las reflexiones de San Vicente hablamos de la estrategia política china con sus autores de ciencia ficción. El problema de los tres cuerpos de Liu Cixin,  劉慈欣 , escrito por un ingeniero que trabajaba en una presa, fue traducido y publicado al inglés para optar a los Premios Hugo, lo más importantes en su categoría. La versión para el lector chino fue podada, como advertía Cixin que recomendaba su lectura en inglés para conocerla íntegra. La película basada en esta novela se convirtió en un hito mundial de taquilla. Es lógico que China considere este género una oportunidad de propaganda, al igual que anteriormente hizo la Rusia soviética.

"Pero en 1985, con la Perestroika, la ciencia ficción desapareció, los escritores estaban en ella por otros motivos". Ricardo San Vicente.

En 1963, Ángel Torres Quesada publicó Un mundo llamado Badoom mientras trabajaba como panadero. Fue el comienzo de una carrera literaria con más de doscientos títulos y el primero en abrir camino a toda una generación de escritores.

Cerramos nuestra última clase con un debate acerca de si la llamada teoría de la fuga rusa podía aplicarse a este fenómeno singular, si la destrucción de la dinámica sociedad gaditana fue ya definitiva en los años 60, a través de la construcción masiva del turismo de costa y la penetración del narcotráfico y la economía mafiosa. Si es posible atribuir la respuesta de una parte de sus hombres y mujeres a una escritura que intentó una huida al futuro, la construcción de un puente sobre un presente incapaz de generar prosperidad para todos. 

Finalizamos nuestro repaso a la ciencia ficción con una pregunta ¿han proyectado los escritores gaditanos una alternativa al gigantesco reto de la nueva economía del conocimiento para su ciudad y por extensión, para todos nosotros?