miércoles, 2 de octubre de 2024

8 de octubre, 19h. - Día de las escritoras y Recital poético - Tertulia El escribidor, Gloria Díez. - Biblioteca Mario Vargas LLosa (Madrid)

 


"Este año, en el Tertulia El Escribidor, en la Biblioteca Mario Vargas Llosa, nos adelantamos a la celebración del Día de las Escritoras con un recital colectivo en el que recordamos a nueve mujeres que nos han precedido en el oficio de escribir y de las que podemos aprender mucho, son: Francisca Aguirre, Florbela Espanca, Gertrudis Gómez de Avellaneda, Carmen Jodra, Anna de Noailles, Alejandra Pizarnik, Stella Sierra, Julia Uceda y María Zambrano. 

Los nombres han sido seleccionados por las nueve escritoras que participaron en el recital: Andrea Aguirre, Joselyn Almeida, Giovanna Benedetti, Gloria Díez, Emma Fondevila, Mari Paz Hernández, Maribel Orgaz, Margarita Todorova y Julia Villalba. 

Tuvo lugar en la Sala de Cristal de la Biblioteca Mario Vargas Llosa (Madrid). 










lunes, 2 de septiembre de 2024

17 septiembre, martes - Presentación, Se nos ha dado tanta belleza. Colección Paseos. Editorial Tundra - Maribel Orgaz - CC Pablo Iglesias, Alcobendas (Madrid)

 




El pasado martes, 17 de septiembre a las 18h. en el Centro Cultural Pablo Iglesias de Alcobendas presenté, Se nos ha dado tanta belleza (Editorial Tundra). 

Ha sido la primera de las presentaciones de este libro sobre mi paseo favorito que transcurre al pie de la Pedriza, en los alrededores de Manzanares el Real. 

La Editorial Tundra ha comenzado este año una colección de paseos y éste es el segundo volumen.


Éste es mi tercer libro de Naturaleza, los dos anteriores son Flores. El esplendor de la Tierra  publicado tan precioso por Alicia Arés, editora de Cuadernos del Laberinto y La salvaje belleza alada, una colaboración con la Asociación Naturalista Primilla, ANAPRI. 


Las siguientes fechas de presentación son las siguientes:

24 octubre, 19h. Centro Cultural Soto del Real (Madrid)

7 noviembre, 19h. Casa de la Cultura Colmenar Viejo (Madrid)

28 enero, 19h. Museo de Ciencias Naturales (Madrid)



martes, 27 de agosto de 2024

Las ciudades como las familias, se arruinan con facilidad - Las ocas blancas, Paulina Crusat.

  


"La platea es cara y el lugar vistoso. El favorito de las casaderas"
Paulina Crusat

Paulina Crusat, autora de la novela Las ocas blancas (1959), reeditada por Visor en 2009 ha sido comparada con Virginia Woolf por el dominio del monólogo interior y con Marcel Proust y el uso de la memoria en la narración. Escribió, al igual que Lorenzo Villalonga en Bearn o la sala de muñecas (1956) a contracorriente de su tiempo, sobre una clase alta incapaz de adaptarse a las nuevas formas de hacer dinero. La novela española de los años 50 estaba inmersa en el realismo y el compromiso ideológico, centrada en la denuncia social, y estas obras cosmopolitas de escritores afrancesados no encajaban en la moda de aquel tiempo y por tanto, no fueron reconocidas. 

Al igual que Lorenzo Villalonga, Paulina Crusat pertenecía a la clase alta, a la gran burguesía catalana, aunque por parte de madre, sus raíces eran andaluzas. Recibió una cultura "refinada y afrancesada, de viajes al extranjero y veladas en el Liceo barcelonés" en palabras de la experta en su obra Carmen González. 

Su segunda novela, Las ocas blancas comienza dedicando ochenta páginas a describir en tempo lento una velada en el Liceo, el lugar al que iban las jóvenes "quizá a escuchar música o a buscar marido. Pero sobre todo para lucirse, para ser expuestas como en una feria y que los demás las contemplasen". 

Desde las primeras páginas se reconoce de inmediato, el genio de una escritora desplegado en la presentación minuciosa de los personajes, en la evocación de los sueños y anhelos de una jovencita de apenas dieciséis años. Del talento de Crusat en recuperar un mundo fantasmal, el de 1916, un tiempo pasado en el que aún, el propio destino era una incógnita. 

La novela tiene como protagonista a Monserrat Sureda, la representación fiel de la propia Crusat y el mundo en el que ella creció. En ese mundo, y en el de Monsi, la realización de una mujer, "su meta no era otra que la aspiración al matrimonio y el cumplimiento de ese requisito social". 

Si bien esta clase social es objeto de crítica, "en cuanto a los principios esenciales de la feminidad establecidos por la sociedad no se ponen en tela de juicio en este libro", aclara Carmen González.

Y es aquí, en la sumisión a un casamiento íntimamente rechazado, en donde comienza el vía crucis de la autodestrucción de Monsi, "un fantasma revelador de la autora, (...) en última instancia, una indagación en su pasado, un recuerdo forzado para recuperar el dibujo que los años han borrado".

"Este es un libro de mujer, y escrito a la antigua", declara en un momento dado, Paulina Crusat sobre Las ocas Blancas. Y a la antigua significa que la protagonista intentó pelear con las órdenes de un mundo que se le venía encima, los mandatos sociales y los familiares. 

En esta lucha fue vencida y la meta, el matrimonio con Miguel, el fin de un viaje, la llegada a un lugar de asfixia y amargura:

 "Esta es la vida, éste es su modo de ser. Acercarse a las cosas es delicioso, pero al asirlas se recibe un coletazo. Te disgustó el día que le conociste; hoy te ha vuelto a disgustar. ¿Quién te dice que otro lo hubiese hecho mejor?... Esta es la vida. Aceptar es aprender, aprender es gobernar. Tener hoy cariño, mañana no, eso es de locos. Seguramente en esas cosas haya, como en todo, una continuidad. La consiguen las personas decentes, la gente sensata que no suelta ni deja ir y que sigue su camino hasta el fin". 

"Ahora es él, la verdad y no queda más remedio que aprender su ley. No hay mucho de qué hablar entre ellos dos; no les gusta lo mismo. A Miguel no le interesa ni el teatro, ni el cine, ni los cuadros, ni las novelas, ni las vidas ajenas. Y todo lo que Monsi hacía antes, ahora lo tiene prohibido. Les queda el paseo, el tenis y poca cosa más. Aunque el tenis también presenta algunas complicaciones a causa de los celos de Miguel, porque casi todos los jugadores conocen a Monsi y la tratan con familiaridad. Sin embargo, Monsi acepta sumisa esa rutina del noviazgo. La ley se aprenderá y, al fin y al cabo, de lo que se trata es de servir, o esa es la opinión de Monsi a los diecisiete años sobre el compromiso que ha contraído con el ancho mundo".  

En torno a Monsi y Miguel, se despliega un mundo de uvas escarchadas enviadas por un amigo al palco del Liceo, partidas de tenis semanales, de familias que gastan más en vestidos y en entradas para ir a sitios "que en instrucción"; en el que aprender  idiomas "y un poco de piano, es bonito pero no es indispensable". De "tés de una sola doncella que mamá llamaba con sorna, de gala".

Esta clase alta, narrada en el momento de su ruina, contempla impotente la calamidad de que sus hijas estudien y trabajen. Y dos relatos se incrustan en la trama principal a modo de ejemplo, el de María Luisa que estudiará farmacia y el de África, contratada como maniquí en un taller de costura, que es consciente de que "ha variado su condición social: ahora pertenece a la clase de la gente que obedece". Y su gente "tiene una habilidad que por lo visto a nadie le falta, un matiz específico que es tan compatible con la efusión como con la sequedad: el saludo al inferior".

África y María Luisa, mujeres que se han adaptado a los nuevos tiempos, siguen siendo, paradojicamente y de manera inamovible, infravaloradas por su género. Cambiar todo para que nadie cambie.

Como profesional en el caso de María Luisa que licenciada en farmacia, lo que se le ofrece es ser niñera en el campo de un chiquillo de doce años sin advertirle siquiera que era tuberculoso y tras esta colocación, "y después de superar el Instituto, el latín, y la Universidad", dar clases de gramática en un colegio. 

María Luisa desiste también de encontrar un compañero licenciado, ya que los universitarios prefieren "muchachas alegres que se hacen jerséis bonitos". 

África, por su parte, explotada por las dueñas del taller, ha de añadir al desprecio de su entorno, el nuevo comportamiento de un amigo que se toma desde el primer momento, demasiadas libertades: "otro que sin saberlo le estaba reprochando su colocación. Trabaja una por decencia y los hombres creen que el primer paso hacia la indecencia es trabajar".

Paulina Crusat se asentó en Sevilla y al fallecer su marido, y ser madre de dos hijas, hubo de trabajar en una oficina mientras compaginaba sus labores de traductora, escritora y articulista en la revista Ínsula. Embajadora de las letras catalanas, publicó en 1952, una Antología de poetas catalanes contemporáneos, prologó las obras del escritor sevillano Manuel Halcón con quien mantuvo amistad y fue autora de cuatro novelas. 

Su correspondencia con Juan Marsé, y el reconocimiento de su influencia, ha sido detallada por Josep María Cuenca en la biografía sobre este autor, Mientras llega la felicidad:

Que la casi olvidada escritora catalana Paulina Crusat había ejercido alguna influencia en esa fase de su vida era cosa conocida, pero ahora disponemos de una narración fascinante y ponderada –apoyada en generosas transcripciones del epistolario– de la relación entre un joven «tímido, serio y lacónico», pero no falto de ambición, y una mujer culta y sensible, cuya vida familiar había sido muy dura, pero que encontró tiempo para guiar con afecto y sinceridad los pasos de un escritor en agraz a finales de los años cincuenta. (...) Nunca, ni cuando llegó el éxito, Juan Marsé olvidó a su mentora; jamás hizo caso de su consejo de escribir en catalán, pero quizá no echó en saco roto la aprensión de Crusat de que sus escritos primerizos tuvieran «poca inventiva» y demasiada «atmósfera», como mandaban las pautas existencialistas y como cumplía a rajatabla la novela neorrealista española. De hecho, Marsé fue uno de los escritores que con más decisión dinamitó más tarde lo que habían sido sus propias convicciones. Y nada tiene de extraño, por tanto, que haya dedicado a la memoria de Paulina Crusat su última novela, Noticias felices en aviones de papel (2014).



 

domingo, 18 de agosto de 2024

Suntuosos manuscritos para bibliotecas nobles - Los Mendoza, Manzanares el Real (Madrid) - Se nos ha dado tanta belleza, Maribel Orgaz. Editorial, Tundra

 



La familia Mendoza era, en el siglo XV, una de las más poderosas de España y tenía en el castillo de Manzanares el Real, su gran casa que, en realidad, apenas habitó un siglo, ordenando construir en Guadalajara otra posesión más espléndida, el actual palacio del Infantado.

Los Mendoza se habían encumbrado tras apoyar la legitimidad de Isabel I de Castilla. En el Museo del Prado es posible ver, El retablo de los Gozos de Santa María, obra de Jorge Inglés, la primera pintura hispanoflamenca castellana documentada. Una pintura realista como se podía ver en el norte de Europa y que aquí no se conocía.

El altar de los ángeles, como también es nombrado, fue encargado por Íñigo López de Mendoza, marqués de Santillana que aparece retratado, en el único retrato de pincel conservado de un noble castellano, detalla el Museo, con su mujer, Catalina Suárez de Figueroa, de rodillas ante la Virgen María. 

Íñigo López de Mendoza, hombre de guerra y poeta nació en Carrión de los Condes, Palencia, en 1398 y falleció en  Guadalajara en 1458; fue tío del también poeta Gómez Manrique y estaba emparentado con Jorge Manrique y Garcilaso de la Vega. 

Su armería y su biblioteca fueron dos de sus mayores empeños. Uno de sus encargos más singulares fueron los, al menos, 12 manuscritos al librero más famoso de Florencia, Vespasiano da Bisticci, 

"Su taller, que produjo suntuosos manuscritos para bibliotecas nobles como las de los Medici, los Estensi, los Sforza, los aragoneses, así como para ricos señores extranjeros, entre ellos el rey de Hungría Mattia Corvino, estuvo activo desde 1440 hacia 1480, cuando, también por la invención de la imprenta, Vespasiano se retiró de su actividad y se dedicó a escribir las Vidas de los personajes que había conocido, directa o indirectamente; entre ellos también se encuentra el Comentario a la vida de señor Federico, duque de Urbino", Biblioteca del Vaticano.

 

Encargar estos libros en los tres últimos años de vida, afirmaba Isabel Ruíz de Elvira, directora del Departamento de Manuscritos, Incunables y Raros de la Biblioteca Nacional de España, da idea de la importancia que les daba el marqués. 

Su biblioteca, de la que preservó cien títulos, fue vinculada a su mayorazgo y tuvo un lugar específico en su casa de Guadalajara ya que antes tenía ejemplares dispersos en sus diferentes posesiones. Íñigo López de Mendoza hizo de este legado una medida de su gusto exquisito.

En la Biblioteca Digital Hispánica es posible encontrar un lugar dedicado a la Colección Mendoza.


Tomé esta fotografía en el torneo medieval que cada año se celebra en el palenque del castillo de Manzanares el Real, Madrid.

De los Mendoza y su huella en el paisaje de Guadarrama, la reconstrucción de su castillo en Manzanares el Real y su jardín medieval, su ventisquero y los cisnes del palacio de Guadalajara he escrito en mi último libro, Se nos ha dado tanta belleza (Editorial Tundra, 2024).



 




 

martes, 2 de julio de 2024

Una vida cotidiana alegre y llevadera - Gozo, Azahara Alonso.

 



En 2010, la escritora y filósofa Azahara Alonso obtuvo una beca de estudios en Malta (en la isla de Gozo) y de todo lo vivido y anotado, nació un libro inclasificable. Una mezcla de reflexión, autobiografía, notas de viaje, citas literarias, todo ello descansado en una hermosa prosa poética. Gozo (Ed. Salamandra) que así lo tituló podría incluirse en ese cajón para todo en el que se ha convertido la autoficción.  

Tres hilos vertebran esta obra: el trabajo, el turismo y la prisa. Y alrededor de ellos, las vacaciones, la precariedad laboral, la imposición de un movimiento constante de un lugar a otro, las colas, la pereza. Y una meta personal: ser improductiva, ser un renegado. "Mi vocación es comprar tiempo con dinero para eso casi cualquier trabajo es bueno, lo importante es no encariñarse con él". 

"Cuándo", se pregunta Azahara Alonso "comenzamos a vivir deseando más de lo que podemos permitirnos (...) lo que nos hace perseverar, esforzarnos y creernos que es bueno". Cuándo compramos el derecho a la pereza para no llevarlo a la práctica.

Malta y sus islas de apenas cuatrocientos mil habitantes que reciben casi tres millones de turistas cada año que los isleños conocen y clasifican de un vistazo, detalla la escritora, tiene como primer problema disponer de agua dulce. Disponer de lo más básico. De todo lo demás hay en abundancia: hiperactividad, viajarismo y falta de imaginación para fabular un mundo sin trabajo inmerso en una turbulencia estructural.

En un determinado momento, la islita paradisíaca perdida en el mediterráneo se transforma en lugar cotidiano. Alonso tiene que trabajar, el dinero de la beca se agota y se da cuenta de que los isleños trabajan mucho y en varios empleos a la vez. Que son igual de hiperactivos que en cualquier gran ciudad, que sus dos o tres trabajos simultáneos no son para vivir, sino para darse caprichos. 

Que nuestro modo de vida no entiende de geografías, "yo no soy lo que tengo, tampoco su reformulación. Soy lo que hago. Soy lo que trabajo: mi capacidad de esfuerzo, mi mérito, el tiempo que regalo a cambio de algo que nunca compensa". 

"Cada vez que alguien se pregunta por la utilidad de su trabajo y por tanto parece, por el sentido de su vida".

Qué hacer cuando no se trabaja, se pregunta la autora, y la respuesta forma parte de lo que ha dado a este libro su encanto: "dejarnos llevar por cierta pereza, olvidarnos de producir. Aprender a pasear o mejor dicho, desaprender a andar con prisa". Es inevitable escuchar como eco de fondo la obra del filósofo coreano Byung-Chul Han, La sociedad del cansancio.

Para quien un año sabático, ¿y de qué vas a vivir, de hacer pulseritas?, le responden burlones sus amigos; consiste en lograr no hacer nada, un lugar ideal de vacaciones debe decir, "nada que ver aquí". Y Alonso propone las ideas del sociólogo Rodolphe Christin como respuesta al frenesí de movimiento en el que vivimos inmersos: crear a escala vecinal las huellas de una vida cotidiana alegre y llevadera, con el fin de habitar espacios en donde sea agradable vivir y en donde no solo busquemos estar de paso. "Esto es la vía para la territorialización del tiempo libre".

El cepo se cierra sobre nosotros con la prisa que no es de las ciudades es una organización sistemática "que interiorizamos y que me llevé como una nube negra sobre mi cabeza". 

En 1985, Bob Black escribió un panfleto, La abolición del trabajo ,un ataque frontal al trabajo, que es la fuente de casi toda la miseria humana existente en el mundo "o de vivir en un mundo diseñado para el trabajo". Para dejar de sufrir, escribe Bob Black, tenemos que dejar de trabajar. Black propuso crear una forma de vida basada en el juego, una revolución lúdica. Un nuevo modelo basado en la diversión, la creatividad y la realización de tareas consentidas por parte del individuo, sin perder de vista la organización comunitaria, a fin de recuperar la humanidad del sistema.

“El Gozo, digo yo”. Azahara Alonso.



martes, 25 de junio de 2024

La pasión te trae a las personas con las que conseguirás volar alto - La estrella roja. M.J.Ruiz, poeta y novelista - Editorial, El Sabor de lo Prohibido

 


M.J.Ruiz presenta estos días La Estrella Roja (Editorial El Sabor de lo Prohibido) que forma parte de una trilogía comenzada con Mi otro yo simulado. En esta novela, la protagonista, una joven chilena de origen humilde y gran belleza y carisma recorre Chile, México y España para lograr su sueño, ser cantante. Norma es valiente y al igual que la autora, "rompe con todo para liberar su alma".

M.J. Ruiz es autora de los poemarios, Autobiografía en verso, Matar a Cupido y de Cántame la verdad, su obra más autobiográfica; pertenece a la Asociación de Mujeres Escritoras e Ilustradoras (AMEIS) y ha participado en numerosos proyectos musicales. Entre otros y como compositora letrista ha colaborado en la creación de temas como Cántame al oído junto a Emilio Facal, ¡Qué tiemble el universo! en colaboración con Beatriz Martín, La Estrella Roja, interpretado por Yamila Terry, y Hay corazones junto a Carlos Burré. Escribe poesía siempre y su prosa "muy temprano, en silencio, tras echar un vistazo a la ciudad desde la ventana", explicaba en esta entrevista. 


Escribir es un trabajo arduo, qué ha sido lo más difícil en esta novela.

En esta novela lo complejo ha sido reflejar las luces y sombras de las historias de los protagonistas. Pero sobre todo, transmitir la idea de libertad sin etiquetas. Norma es una mujer libre y ha luchado mucho para alcanzar esa libertad. Es libre de pensamiento, de sentimiento y de acción. 

He querido reflejar la libertad de elección en cada uno de los personajes masculinos y las mujeres que son trascendentales en la historia personal de Norma. Elección, equivocación o acierto, sin etiquetas, sino con su verdad hacia delante y luchando por una causa común.  Amar nos hace libres, pero jamás nos condiciona. O esa es la idea. 


La protagonista es una mujer de gran belleza, ¿esta cualidad sigue siendo un valor incuestionable?

La belleza es una cualidad que puede esclavizar. He querido criticar cómo, en ciertas sociedades e industrias, ser guapa puede ser tanto un beneficio como una condena. Sin embargo, Norma es hermosa por muchas más razones que su apariencia física; es una mujer sensual y arrebatadora, que cautiva con su voz. Incluso sin mirarla, sentirías su magnetismo. Hay muchas personas que impactan por lo que son; la verdadera belleza reside en el alma. 


En la dedicación al Arte como una nueva oportunidad en la vida, como una vocación de la protagonista de La Estrella Roja, Norma, ¿cuánto hay de experiencia propia?

Escribo por amor, por amor a mí misma. Es una vocación temprana y una entrega apasionada. No sería yo si no lo hiciese, ya que es mi manera de interactuar con la vida. Estuve un tiempo alejada de mi parte creativa y, al regresar, descubrí que llevaba años sin ser yo. Además, creo en la arteterapia, y la he usado conmigo misma; es la mejor forma de mejorar el bienestar emocional.



Qué comentarios estás recibiendo de los lectores y cuál de ellos te ha sorprendido.

He conseguido transmitirle la pasión de Norma, que entiendan que los límites se los pone solo ella. Una señora mayor me demostró su respeto ante uno de los capítulos más atrevidos de la novela. A pesar de haber sido educada en una cultura mucho más opresiva, su tolerancia y sus palabras me hicieron comprender que con obras como esta podemos aportar nuestro granito de arena.


La promoción de la obra es parte fundamental del trabajo de un escritor hoy en día, en lugar de las editoriales como se hacía tradicionalmente, ¿en tu caso qué sugerirías o recomendarías?

Sinceramente, una escritora debe escribir, pero puede combinar esto con sus obligaciones diarias. En mi caso, a las 6 de la mañana ya estoy sentada frente al ordenador. Sin embargo, confieso que desde que tengo un equipo de trabajo, puedo centrarme en escribir casi al 100%. Es fundamental contar con un equipo preparado que te ayude en el camino de la proyección de la obra. Las redes sociales son esenciales para compartir las impresiones de los lectores, así como tus propias impresiones y las novedades de lo que vas creando. Hoy en día, son el currículum de una artista. Además, nos permiten interactuar y colaborar con otros artistas y tener mayor alcance. Almudena y Mamen son luz para mí; son mujeres profesionales que te impulsan con la energía y la pasión que desprenden. Al final, como veis, la pasión te trae a las personas que te ayudarán a conseguir las alas que te harán volar alto. 




lunes, 10 de junio de 2024

11 junio, Feria del Libro de Madrid - Maribel Orgaz

 


Nada más llegar a la Caseta de la Editorial Sargantana para firmar Mujeres en la Historia de Madrid que ya va por su segunda edición, me estaba esperando con un gran ramo de flores Martina, la hija de mi querida amiga Virginia Baudino. 

Este año compartí caseta con el escritor Rubén Espinosa al que ya conocí en la Feria del Libro de Fuenlabrada. 

Además, en esta edición de la Feria del Libro de Madrid en el precioso paarque del Retiro, he podido conocer a Víctor Alós de Unrated Comics  que se ocupaba de atender a los lectores de Sargantana.

La caseta era la número 310 pero antes me pasé por la 201, para darle un abrazo a la editora Alicia Arés que hizo una edición preciosa de Flores. El esplendor de la Tierra en Cuadernos del Laberinto.









sábado, 8 de junio de 2024

Un viaje interior, una nueva visión del estado de coma - En busca del alma perdida. Inmaculada Fernández-Baíllo - Editorial con M de mujer

 


El pasado 5 de junio, en el Centro Cultural de Soto del Real (Madrid) Inmaculada Fernández-Baíllo presentó su libro, En busca del alma perdida. Inmaculada me pidió que le acompañara en la mesa de presentación y abrieron la tarde, Juan Sobrino, bibliotecario y Walter Hermann, presidente de la Asociación Chozas de la Sierra.

La sala abarrotada escuchó el testimonio, porque eso es este libro, una vivencia fascinante acerca de lo que a veces las circunstancias inesperadas nos ponen delante y que aceptamos sin saber muy bien a dónde nos llevarán.

En el caso de Inmaculada, a considerar que el estado de coma está siendo abordado de una manera diferente por el enfoque coma work que los especialistas, Amy y Arnold Mindell han planteado con resultados sorprendentes. Más allá del enfoque médico estricto hay otra propuesta sobre cómo abordarlo. 

Y lo que, como Inma explicó, comenzó por echar una mano a una amiga que le pidió visitar a una joven en coma, se convirtió en un antes y un después en su vida.

"El enfoque de los Mindell", detallaba Inmaculada que es ingeniera de profesión y escribió este libro a modo de transcripción de un diario-blog que escribió durante más de un año, "es que el estado de coma es un viaje interior de la persona y hay que entrar ahí, comunicarse con ella y abandonar la idea de sacarla, de que todo lo que se ha de hacer consiste en despertarla. Un gran conflicto, la familia que rodea a esa persona, hay otros factores que influyen en ese estado vegetativo", explicaba.

En el libro, En busca del alma perdida, se detallan los diferentes progresos de la paciente y también un extracto sobre el trabajo de los Mindell para quien quiera profundizar en él.


Inmaculada estará firmando el próximo jueves, 13 de junio a las 18.30h. en la Caseta 97 de la Feria del Libro de Madrid.

Puedes consultar el  blog original aquí  







sábado, 1 de junio de 2024

Los poetas se enfrentan a la crítica de la propia familia que al leerles descubren que no son como ellos creían - Celeste Lamas, poeta.

Celeste Lamas con José Manuel Contreras

Celeste Lamas es terapeuta y poetisa. Miembro de la Unión Nacional de Escritores de España, colabora actualmente en Radio Morata todos los miércoles y en el programa de Mónica Puzzo (Argentina). Autora de varios poemarios, Un Canto a la búsqueda  del amor y de uno mismo (Entrelíneas, 2007) que ha agotado sus tres ediciones, Canción de Cuna a una Vida, cuya tercera edición vio la luz en 2019 (Mandala Ediciones); Aires de Libertad y Antes y después de la pandemia (2022). Ha publicado poemas en las antologías, Letras compartidas, Letras con Arte, Rascamam y Versos en Primavera. Su intensa labor cultural incluye colaboraciones en revistas, Sendero 8, Espacio Humano y Maldita Musa de ASEAPO. En reconocimiento a su dedicación poética, entre otros galardones, obtuvo en marzo del 2022, el Premio Mujer excepcional en Arte y Cultura, del Ayuntamiento de Móstoles (Concejalía de Cultura e Igualdad). Colaboradora habitual de los encuentros de escritores del Ayuntamiento de Alcorcón, este mes ha ganado el slam de poesía de Móstoles, "fue una auténtica sorpresa porque competía con muy buenos poetas".  Puedes leer otra entrevista anterior a Celeste aquí.  En la fotografía, Celeste Lamas con José Manuel Contreras director del programa literario Madrid sur, Contreras también fue el autor del prólogo del poemario, Aires de Libertad. 


En todos los años de quehacer poético, cómo describirías tu evolución como poetisa. 

Tal vez la evolución de mi persona, como ser humano, más comprensión con mis semejantes, incluso con la vida y todo lo que a ella le rodea. Me gusta a través de mis poesías homenajear a las personas mayores, creo que no  valoramos su sabiduría  cuando las vemos con su traje de vejez, una sabiduría adquirida a través de miles de experiencias, a personas con Alzheimer, amigos, familiares, que realmente son la vida misma. Más soltura con la palabra. Realmente la poesía esta en todos y en todo. Más despertar de conciencia. He recibido números premios desde aquel primer libro donde a partir de entonces mi vida va escrita en  poesía.

Mis poemas siempre llevan un mensaje positivo con un toque de espiritualidad.


Si un lector no conoce tu obra, que libro sería el mejor para empezar a conocer tu poesía.

Tal vez por el primer libro, aunque empiecen por donde empiecen, y a pesar que todos mis libros están basados en mis propias vivencias en mi vida, todos llevan un mensaje una reflexión a nuestro interior, nada pasa por casualidad, están vivencias me están haciendo crecer como ser humano. Empiecen por el libro que empiecen, seguro que algo les toca el corazón. Si no, no merecería la pena como decía Franz Kafka en su libro Cartas al Padre.


La poesía recitada y la poesía leída en silencio. Cuál es tu opinión, las ventajas de una y otra forma de disfrutarla.

Yo creo sea recitada o leída, si la sientes si te llega muy adentro, si la letra y la voz te conmueve, si esa poesía te hace reflexionar, sentir, da igual la forma.

Algunos lectores míos, me dicen que mis libros los tienen en la cabecera, que les ayudan mucho en algunas ocasiones.


¿Cuál es la principal dificultad hoy en día para escribir poesía?

Para mí la mayor dificultad, es el miedo a la crítica, especialmente a la familia, pues cuando nos leen se dan cuenta que tal vez no nos conocían como ellos pensaban que éramos. No escribir con el corazón por ese miedo. Sin embargo un poeta tiene que ser muy fiel a sí mismo a sus sentimientos, sin tapujos, si quiere llegar al corazón del lector, hacerse uno, escritor y lector es algo maravilloso.

Algunos grandes escritores de hoy en día no entienden de la sencillez de la palabra y de ahí las críticas a los que preferimos despertar conciencias con la sencillez de la lectura poética, a escribir conceptos complicados, hay personas que cogen un libro de poemas para relajarse y disfrutar, pero si se encuentran con palabras incomprensibles, y tiene que coger un diccionario para entender lo que dice el verso, pues cierran el libro y ahí se escapó la magia de la poesía  y el relax que buscaban.

Un poema tiene que despertar, sentir, llorar, reír, disfrutar.




Que autores contemporáneos de poesía son significativos para ti

Aunque me suelo inspirar más en la propia vida y lecturas de Metafísica, Hay poetas que son grandes que llegan al corazón que no te cansas de escuchar. Por ejemplo Antonio Mata recientemente fallecido.Enrique Gracia Trinidad, Alberto Morate o Mariana Feride.Mariana Feride. Una poeta maravillosa, que aún no ha publicado ningún libro, pero hay que quitarse el sombreo ante ella es Susana Fraile, es magnifica. 


   Dedicado con mucho cariño a mi gran amiga de siempre. Victoria.

                           Ausente de tus recuerdos
                                            
                                 Se perciben voces en el viento
                                 Susurros lejanos traen luz a mis
                                 Recuerdos.
                                            Recuerdos inciertos.
                                 Ramilletes de flores y sombras
                                 Alimentan mi mente.
                                             Y me contento.
                                 ¿Se llaman flores?  ¿Son sombras?
                                            No lo recuerdo.
                                  Sé que las toco, las huelo y me 
                                  Embriaga un lejano sentimiento.
                                  Manos amigas, acarician mi
                                  Rostro.
                                  No sé quiénes son pero lo          
                                  Agradezco.
                                  Besan mis manos con ternura me
                                  Hablan, me cuidan.
                                             Ese calor si recuerdo.
                                  Apartan el vacío en el que me      
                                  Sumerjo.
                                               Y me contento.
                                  Me dan fuerza para esta nueva vida
                                  Que estoy viviendo.
                                                ¡Estoy viva!
                                  Eso sí que es cierto.
                                  Porque los sentimientos que se graban
                                  En el Alma.
                                  Jamás, jamás  los podrá  borrar
                                  El tiempo.





lunes, 27 de mayo de 2024

1 junio, sábado - Encuentro Clubes de Lectura - Biblioteca Antonio Mingote, Madrid

 


El pasado 1 de junio, tuvo lugar un Encuentro de Clubes de Lectura, de tribus lectoras en la Biblioteca Antonio Mingote. El coordinador y organizador es Juan Sobrino de la  Biblioteca Pedro de Lorenzo de Soto del Real (Madrid).

Por mi parte, moderé la mesa en la que participaron la traductora Isabel Gallarza, el editor de Nórdica, Diego Moreno y otros agentes del libro.

La jornada, abierta al público, finalizó con el encuentro de Marta Sanz y los lectores, a propósito de la novela Farándula.





Biblioteca Pública Antonio Mingote
C. Rafael Finat, 51, Latina, Madrid - 91 5093625




martes, 21 de mayo de 2024

Hay que construir otra belleza - Alessandro Baricco - Los bárbaros, The game y Homero, Iliada.

 



Maribel Orgaz - @leerenmadrid
En 2006, el escritor italiano Alessandro Baricco publicó Los bárbaros y 12 años después, The game. "En realidad", explicó en una entrevista, "se tendría que haber titulado Los bárbaros 2 porque es una continuación".

Aunque entre ambos se haya producido un cambio en la sociedad que los ha recibido, "porque ahora, la mayoría de la gente admite que vive una revolución necesaria e irreversible".

Esta gran revolución es el mundo digital, es Internet "la primera revolución que no nace en Europa y es contra ella". Un cambio de paradigma, una mutación que viene a salvarnos de nuestra cultura, de nuestro conservadurismo "protegidos por las cosas que hay que salvar, reposando, depositando huevos y esperando al límite para salir de la guarida". 

La celebración de Baricco, al que se le etiquetó como un ingenuo tecnoentusiasta, se basa en que, todo lo que un europeo celebra, atesora y conserva ya sean ruinas o canon literarios avalados por "sacerdotes culturales", desconfiando y temiendo el futuro, condujo a las carnicerías de dos guerras mundiales.

Baricco no es un ensayista, es una mente narrativa que da cuenta de este nuevo mundo digital en el que apenas somos "conquistadores de una tierra de la que no tenemos mapas". Sus ensayos relatan de qué ha venido a liberarnos el mundo digital.

Internet no es producto de haber fabricado chips, móviles o portátiles, hemos creado toda esta tecnología como consecuencia de haber sufrido un seísmo interior. 

Un grupo de ingenieros, gente formada para resolver problemas y no para elaborar filosofías, migró al mundo digital "que es efecto y no causa, fugándose, escapándose de un siglo que ha sido uno de los más horribles en la historia de la humanidad". 

Esto ocurría en Occidente, una civilización aparentemente sublime, cuyas catástrofes fueron producto de sus principios, de su racionalidad, de su modo de estar en el mundo, "no fueron un imprevisto". 

Pero entonces, en esta huida, intentando dejar atrás todo, ¿qué podía salvarse? "Veníamos de un sistema granítico de principios y valores y la élite que lo custodiaba". Y esos ingenieros californianos inventaron un plan de fuga, "fue una insurrección, sabían de qué huir, burlándose de los grandes palacios del saber y los sacerdotes".

El mundo digital es una  nueva civilización que abandona la sacralización del pensamiento profundo porque "ahora unimos puntos y pensamos rápido", del saber erudito que a menudo sólo encubría penuria de pensamiento, de la inmovilización en fronteras: baja y alta cultura, límites territoriales, formas rígidas de relacionarnos en conceptos como familia o raza.

Internet significa un lugar en el que opinar y expresarse, una prerrogativa que ya no es solo de un grupo privilegiado que consideraba esta capacidad un derecho inherente a su posición social. "Antes, cada uno de nosotros podía hablar a través de nuestra religión o nuestro partido político, nuestro sindicato o nación. Ahora, podemos hacerlo individualmente".

Al elaborar un mundo digital, queríamos saltarnos al mediador, dejar fuera a las viejas élites, "si echas a la agencia de viajes, ¿por qué no al médico? El pasado quedó estigmatizado como una técnica mental incapaz de resolver problemas y poner en movimiento la experiencia. En comparación, la realidad verdadera, el primer mundo, era un lugar lento, complicado, lleno de fricciones y sostenido por un orden obtuso". 

"El mundo tiene ahora un segundo sistema sanguíneo, dos corazones bombeando, influyendo uno en otro. La realidad se compone de dos y vivimos en los dos. Somos una humanidad aumentada".

El smartphone es una extensión de uno mismo, no "un mediador". Inventamos la multitarea porque queríamos salir del atasco de una sola, "inventamos el teléfono móvil porque quisimos escapar de una prisión, responder a una pregunta o acallar un miedo".

En 2004, Alessandro Baricco publicó Homero, Iliada una reescritura del poema épico de la Iliada. Una tercera parte a sus ensayos sobre el mundo digital.

Si el mundo digital fue creado para huir de las raíces de una civilización que habían dado lugar a dos grandes matanzas a escala industrial, Homero, Iliada es una reinterpretación del corazón del problema, "la guerra como suprema experiencia de belleza para un hombre, terrible pero llena de intensidad". 

Si no queremos más guerras hay que hacer algo, "tiene que haber otros momentos en la vida de un hombre en los que encontrar belleza e intensidad".

La Iliada, un poema dedicado a glorificar el combate, en el que sólo una muerte espectacular en la batalla asegura a un hombre la inmortalidad, es la raíz de los desastres del siglo XX, de nuestra cultura occidental, "provenimos de ahí", afirma Baricco. Es necesario construir otro sentido de ser hombre, porque la memoria de la guerra por muy espantosa que sea no nos ha parado". 

Esta última revolución, de The game ha llevado a cabo una redistribución de riqueza y poder. "Lo único que podía cambiar el orden establecido, que hacía cambiar de manos la riqueza era la guerra y a pesar de que la Revolución Francesa nos demostró, nos hizo pensar que podíamos cambiar el mundo a voluntad, en unas palabras que sonaban proféticas, se lamentaba en una conferencia: "somos esclavos de una repetición". 



The game forma parte del curso que imparto hasta el mes de junio, Libros visionarios en la UP Miguel Delibes de Alcobendas.

Profetas del desastre, la fascinación por el apocalipsis - Las distopías y 1984 de George Orwell ha sido otra de las clases que he impartido en el marco de este curso

En la Universidad Popular Miguel Delibes y destinado a adultos, he impartido hasta ahora varios cursos de literatura: Benito Pérez Galdós, Miguel Delibes, la literatura de la Guerra Civil española, Crónica periodística, Premios Nobel de literatura, el ciclo Una novela, una ciudadUna mujer, una obra, Escritores en el centro del margen, Narradoras españolas contemporáneas, etc. Todos ellos muy bien recibidos y siempre completos.

Puedes leer sobre algunas de las clases impartidas con anterioridad en el ciclo: Una novela, Una ciudad; en estos link:


                  Calles que quedan fuera de la historia - La Barcelona de Javier Pérez Andújar

                  El Aranjuez de José Luis Sampedro

 

Más información - UP Miguel Delibes, Av. de la Magia, 4, 28

martes, 30 de abril de 2024

La Montaña Mágica me cambió la vida - Luis Montiel, médico y escritor - “Aprender de la enfermedad: En el centenario de La montaña mágica, de Thomas Mann“ - Soto del Real, Madrid

 


"Leí la montaña mágica cuando era muy joven", comenzó Luis Montiel, médico y escritor, especialista en Thomas Mann, "y me cambió la vida aquel ascenso al sanatorio de montaña suizo del joven Hans Castorp, una bajada a los infiernos de la enfermedad y la muerte".

Montiel, ahora médico jubilado, habló hace unos días en la Biblioteca Pedro de Lorenzo de Soto del Real sobre una novela que le fascinó desde su primera lectura y que le afirmó en su decisión de estudiar medicina.

"Hans Castorp, el protagonista, era un joven recién licenciado muy brillante sin conocimiento real de la vida y me identifiqué desde el primer momento con esa necesidad de saber", explicó.

 "Aunque su peripecia vital es por supuesto diferente, porque Castorp se retirará siete años a una montaña para conocer el amor, la enfermedad, la amistad, incluso, el valor del ocio".

"Cuando ese joven alemán que sube de visita a un sanatorio alpino para tuberculosos y se queda siete años allí, da por finalizado su aprendizaje vital, baja para alistarse en la I Guerra Mundial, para ir probablemente a la muerte".

"¿Es ese el mensaje de este libro?", se preguntaba Montiel que organizó el acto intercalando lecturas de fragmentos de la novela por parte del público, "creo que en La montaña mágica, Mann muestra cómo la inmersión en el mundo de la enfermedad puede tener un efecto profundamente educativo en una persona sensible, hasta el punto de llevarla desde una posición falsamente idealista hasta una madurez comprometida con la realidad y con los otros seres humanos".

Luis Montiel que realizó una tesis doctoral sobre Thomas Mann, es ponente habitual sobre el escritor y autor de Alquimia del dolordisponible en abierto aquí.


Al finalizar, el público le pidió que recomendara una traducción de La Montaña Mágica y Montiel se refirió a la de Mario Verdaguer publicada por Plaza y Janés. Sobre la polémica suscitada por la más reciente, la realizada para Edhasa por Isabel García Adánez, Montiel ha publicado este artículo cuestionando su enfoque de modernización del texto. 

"Luis, dinos algo", le solicité, "sobre la proeza de escribir Los Buddenbrook a los veinte años y cuál sería tu recomendación para comenzar a leer a Mann".

"Es la historia de su familia, de su declive, del que se salvan él y su hermano porque se dedican a escribir y no a los negocios", respondió, " y sin duda, la mejor novela para empezar con Mann es Muerte en Venecia". 

Durante su intervención, se incluyeron fotografías del sanatorio de Davos reconvertido en hotel de lujo en la actualidad y de placas radiográficas de tórax que mostraban los métodos brutales con los que la medicina de la época intentaba salvar al paciente; todos ellos descritos en la novela: "la medicina entonces no podía aportar más", explicó Montiel.

"No idealizo el sufrimiento y el dolor, porque médico de formación, aunque sin ejercicio profesional ya, jamás caeré en la apología de la enfermedad, la muerte o el sufrimiento físico o moral. Pero de ahí a negar la posibilidad de una «alquimia del dolor» media un abismo". 





 

jueves, 18 de abril de 2024

Mujeres - Palabra, I Encuentro - 20 de abril - Alcalá de Henares, Madrid

Foto. Ayuntamiento Alcalá de Henares

El próximo 20 de abril se celebrará en Alcalá de Henares el I Encuentro de Escritoras Mujer-Palabra que estará dirigido por la dramaturga, Amaranta Osorio y que constará de dos mesas redondas y una exposición, Conquistadoras de la fotógrafa chilena Isabel Wagemann.

Las dos mesas tendrán lugar el 20 de abril en la Capilla del Oidor. La primera de ellas convocada bajo el lema, Mujer-Palabra-Libro, contará con las escritoras Daniela Tarazona, Nuria Labari y Laura Freixas. La segunda llevará por título Mujer-Palabra-Cuerpo, y estará moderada por Carme Riera Sanfeliu, editora de Alfaguara. En ella intervendrán, entre otras, Susana Martín Gijón y María Folguera.

Daniela Tarazona

La novelista mexicana Daniela Tarazona es autora de El animal sobre la piedra y de El beso de la liebre, con la que fue finalista del premio Las Américas (Puerto Rico). Además, es autora del libro Clarice Lispector. La mirada en el jardín, en colaboración con Nuria Mel. Su novela más reciente es Isla partida, Premio Sor Juana Inés de la Cruz. Ha sido traducida al inglés, francés, portugués y checo.

La santanderina Nuria Labari, escritora y periodista, ganó con su primer libro de relatos, Los borrachos de mi vida, el VII Premio de Narrativa de Caja de Madrid. Es autora de Cosas que brillan cuando están rotas, La mejor madre del mundo y El último hombre blanco. Desde 2018 publica una columna semanal en el periódico El País.

Susana Martín Gijón, sevillana, es autora de la exitosa saga de novela negra protagonizada por la inspectora Camino Vargas. Es autora de Más que cuerpos, Desde la eternidad, Náufragos o Vino y pólvora  y La Babilonia, 1580. Ha sido galardonada con el Premio Avuelapluma de las Letras, el Premio Cordoblack por su contribución a la renovación del género negro, el Premio Cubelles Noir o el Granada Noir.

Amaranta Osorio, dramaturga, ha recibido los premios Calderón de Literatura dramática o Jesús Domínguez, entre otros, y sus obras han sido estrenadas en España, Chile, Colombia, México, Argentina y Checoslovaquia. 

La exposición, Conquistadoras, Las mujeres salmón estará abierta hasta el 5 de mayo y es un proyecto expositivo de la artista chilena Isabel Wagemann especializada en el retrato de escritoras, escritores y artistas. 

Puedes consultar el programa completo aquí.




lunes, 15 de abril de 2024

Es sabido que un poeta se encuentra consigo mismo cada vez que inicia un poema - Autorretratos poéticos, 140 autores en el laberinto interior - Selección de Enrique Gracia Trinidad y Alicia Arés

 


El poeta Enrique Gracia Trinidad y la editora, Alicia Arés han seleccionado una serie de autorretratos poéticos que van desde Raquel Lanseros a Amado Nervo, Javier Lostalé, Pepa Nieto, Eva Vidal y así más de cien poetas reunidos en un volumen singular, Autorretratos poéticos, 140 autores en el laberinto interior.  "Es sabido que un poeta se encuentra consigo mismo cada vez que inicia un poema. Puede estar al lado, detrás, delante, cerca siempre, pero hay ocasiones en que decide estar dentro y ser él mismo el destino total de sus versos, contarse a sí mismo, decirnos quién es, quién quiso ser, quién quiere llegar a ser". Enrique Gracia es poeta y divulgador cultural, profesor y conferenciante. Alicia Arés, fundadora y directora de la editorial Cuadernos del Laberinto, especializada en poesía y novela negra, es "bibliófila, sobre todo coleccionista de primeras ediciones dedicadas por el autor. Becquerianista, motera y muy de perros".


Un libro pensado para tener a mano, leer un poema, volver en otro momento, quizá la forma ideal de leer un poemario.

Enrique Gracia.- Esa es una gran ventaja de esta antología de autorretratos con muchos autores, pero también de muchos libros de poesía. Estos libros no unitarios ni siquiera hay que leerlos en orden. Pueden abrirse por cualquier parte, aleatoriamente. 

Las novelas y algunos libros de poesía que pretenden una continuidad temática, en poesía son más escasos, sí deben leerse continuadamente para no perder el hilo.

Eso es una ventaja en este mundo con tantas prisas estúpidas en que tantos afirman no tener tiempo para nada y en el que muchos parecen incapaces de leer algo más que un eslogan. Pues ahí tienen la poesía: la brevedad junto a la intensidad.

 

En el mundo del libro electrónico, la poesía resiste en papel.

E.R.- Creo que es más cuestión técnica que otra cosa.

Por un lado, los libros de poesía suelen ser pequeños y más llevaderos que otros libros grandes que los electrónicos sustituyen muy bien para llevar en el bolsillo. 

Pero, sobre todo porque los libros electrónicos dan problemas con los formatos a la hora de la poesía escandida, suelen descomponer los versos. Cuando son poemas "en prosa" o "a caja" no ocurre.

Si se es un buen lector de poesía hay menos dificultad porque el ritmo te suena en el oído; si no, engaña que el corte de los versos dependa del formato de la pantalla o esté descuidado.

Hay quien insiste en que el olor del papel... el tener el libro en las manos... Eso está muy bien, pero más allá de la costumbre y la nostalgia tanto da leer poesía en pantalla o en papel: la complicidad lector-poeta es la misma. 

Ya dio problemas el papel frente al pergamino a partir del siglo XI y hay que ver dónde estamos.

 

Cuál dirías que es la tendencia de la poesía.

E.R.-  Estamos en un momento bastante ecléctico. Conviven multitud de tendencias: los que continúan en el surrealismo, los de la línea clara, los metafísicos... Y en técnica los que siguen estilos clásicos, los de las últimas tendencias de verso blanco, medido y pocas veces rimado, los que prefieren el poema muy libre, las más de las veces por desconocimiento técnico, y los que ya directamente suprimen puntuaciones, cortan los versos a voleo y rompen la sintaxis y hasta la gramática ¿es esta última la tendencia actual? No, es tan sólo una moda, entre jóvenes y no tan jóvenes, por la facilidad que hay de divulgar en redes y editoriales que ven negocio en ellas. 

Afortunadamente, la pluralidad de tendencias permite escoger lo mejor y desechar lo peor y pasajero. 

Han existido muchas tendencias, pero Homero, Dante, Lope, Quevedo, Whitman o Pessoa siguen siendo fundamentales.

 


En Autorretratos poéticos, has reunido obra de 140 poetas, cuál era el criterio de selección.

Alicia Arés.- Sin duda, la mirada sobre uno mismo. El reto del autorretrato es cómo describirse a uno mismo: ¿qué destacamos cada persona cuando nos encontramos ante el espejo?, ¿de qué huimos, cuáles son nuestros miedos o angustias? ¿qué nos define o ensalzamos?

El proceso editorial de este libro ha sido apasionante ya que según nos iban llegando los poemas, íbamos comprobando lo diferentes que todos somos.

Muchos autores incidían en lo significativa que era la infancia; otros consideraban las aficiones como el eje de su personalidad; otros, su forma de ver el futuro; el amor, los hijos, En fin, cada uno somos un mundo, pero es cierto que la voz de los poetas logra que nos identifiquemos y que el enorme espacio que separa lo individual de lo universal se estreche. Los poemas que conforman esta antología son crónicas personales que reflejan a toda la humanidad. 


Como editora y lectora de poesía siempre has reivindicado la figura de tu padre, el escritor Luis García Arés.

A.A.- Empezaré diciendo que le echo de menos todos los días. Recuerdo sus manos, su tímida sonrisa y que  cuando yo apenas tenía 10 años me sentó en la mesa de su despacho y me explicó qué era un soneto, nunca se me ha olvidado el ABBA ABBA CDE CDE.

Mi padre es la persona más importante en cuanto lo que me conforma como persona. Con él aprendí a amar los libros, el arte; me inculcó la fe en Dios y me inició en el mundo de la edición. 

Ahora leo y publico sus poemarios y siento que nos miramos enfrentados en un espejo, pero siempre unidos. Como se puede leer en Corintios: «Ahora vemos en un espejo, confusamente. Entonces veremos cara a cara», que es justamente la cita que abre esta antología de autorretratos.

Era un hombre extremadamente culto que ya desde niña me llevaba a tertulias literarias, ferias del libro, exposiciones,  subastas de arte, anticuarios y que poesía una biblioteca extraordinaria y llena de joyas.

Mi madre también fue un modelo de mujer para mí. Una persona adelantada a su tiempo y luchadora como ninguna. 

Leer la poesía de mi padre es una forma de vencer la muerte, que al fin y al cabo es una de las consecuencias de la literatura.


Es interesante destacar que la antología se abre y se cierra con "un Adolfo": Gustavo Adolfo Bécquer y Adolfo Yáñez. ¿Es un detalle buscado o ha sido casual?

A.A.Absolutamente todos los detalles del libro son intencionados. No hay nada, por mínimo que parezca, que sea azaroso. Fíjate, la antología la forman 140 autores, que es justamente el número que hace este volumen en la colección, otros detalles tan nimios pero curiosos como que el ISBN acabe en 3, que es mi número favorito y el día en que nací. 

Me encanta mi trabajo, y disfruto cada pequeña particularidad que pueda aportar, aunque sea solo para mis ojos.

Respecto al orden: no queríamos una disposición cronológica, aunque evidentemente los autores clásicos debían abrir la obra. Y siempre hemos pensado que la rima II de Bécquer era el autorretrato más adecuado. Deseábamos una puerta que conmoviese, y con este poema se logra, no cabe duda. 

Desde niña me ha acompañado la obra de Gustavo Adolfo Bécquer. Evidentemente no sabía que era estar enamorada pero, en esa primera infancia, sentía que el amor debía ser cómo ese poeta lo contaba y leía sus rimas con una gran pasión esperando el día que me pasase a mí. Con los años voy comprendiendo que es mejor no ser tan desgraciada y pasional y que las relaciones deben darte más alegrías que sufrimientos; pero eso es algo que no piensas en la infancia.

Además tuve la fortuna de leerlo en su primera edición, que mi padre tenía en su inmensa biblioteca, la que publicaron sus amigos al año de fallecer (1871. T. Fortanet; Madrid).

Y el poema que cierra la antología es Carne inmortal de Adolfo Yáñez, un poeta abulense por el que siento predilección y que además nos deja un mensaje final tan hermoso y esperanzador como es: «¡Y en lejanas explosiones / vivirá eterna mi alma!».


17 de febrero, Ángeles en un espejo

Antonio Orihuela

Un niño me ve jugando en el jardín
y me pregunta qué edad tengo.
-Cuarenta y siete.
Es invierno, está atardeciendo
me pongo en pie y veo a lo lejos
el corral de la casa de los Escribanos,
la cocina de villa Paquita en Los Puntales,
el dormitorio del piso alto de la Friseta,
el salón grande de la casa de la calle Cuna de Sevilla,
el patio de luz lleno de japoneses de la calle Gloria (...)