Antonio Perán Elvira publica nuevo poemario, Discurso de Blanda y firme que, en cierta manera, rinde homenaje a la tradición poética clásica, un lugar del que nunca se fue, según afirma en esta entrevista. Autor de dos libros sobre dominó, Una partida de dominó y Escuela de dominó, Perán obtuvo recientemente una mención de honor en el Concurso Internacional Puente de Palabras y ha sido premiado con el Tiflos de Poesía, convocado por la ONCE; y el El Arka de Colombia. Es autor de los poemarios, Diálogos con mi perro Sancho, En la Mansión de los Céfiros, Vía crucis y Discurso de Blanda y Firme.
Lo femenino y lo masculino, lo blando y lo firme. ¿Aún podemos categorizar de esta manera?
Desde luego que no, pero hay que tener en cuenta que éstas son dos posiciones ante las cosas, de las muchísimas que hay, tan válidas como las demás.
En una entrevista anterior afirmabas que el concepto del ritmo en la poesía había cambiado. En tu caso ¿la opción es volver a las formas clásicas? A las décimas dobles. ¿Crees que hay algún cambio en este sentido?
No puedo volver a aquello de lo que nunca me fui, pero, curiosamente, utilizo la décima doble de quince sílabas por verso, precisamente, para diluir el efecto de la rima. En cuanto al ritmo y después del lenguaje poético, para mí es algo irrenunciable.
En esta conversación, fluyen metáforas, conceptos filosóficos, ¿en búsqueda de una orientación entre tanta confusión? ¿de una verdad?
Blanda y Firme, como todos nosotros, están convencidos de lo que dicen; al menos, de lo que creen, por lo que la confusión no es algo que les hagamos admitir con facilidad. Somos los que les conocemos los que tenemos que decidir con quién y cuándo estamos, y en qué casos; sin que el decantarnos nos haga aproximarnos a más realidad que la que ya nos rige.
Has explicado que para escribir hace falta concentración y continuidad pero que tu vida profesional te lo había impedido.
Efectivamente es así, lo que no significa que me arrepienta de mi vida profesional. He tenido una vida profesional muy plena, de la que le estoy agradecido a todos los que la hicieron posible, Ahora me toca a mí buscar la plenitud en otras actividades.
Antes de dar tus versos a la edición, a la luz. ¿Hay un lector de confianza? Alguien a quien pidas opinión.
Sin duda. Tengo algún amigo que se ocupa de eso, pero fundamentalmente es mi mujer la que lo hace.
Cómo va el dominó…
Lamentablemente no puedo dedicarle el tiempo que me gustaría, pero de vez en cuando vuelvo a las andadas del juego. Aunque no lo parezca, y según mi opinión, por supuesto, el dominó es un juego que debería practicarse con más frecuencia, porque nos ayuda a conocer y conocernos.
Discurso de Blanda y FirmeAntonio Perán ElviraEditorial, Cuadernos del Laberinto
No hay comentarios:
Publicar un comentario