Maribel Orgaz - info@leerenmadrid.com
Javier Miró es el alma mater del proyecto Libros Prohibidos, dedicado a la literatura independiente y director de la agencia literaria Autorquía. En 2014 publicó Rebelión 20.06.19 en TriskelEdiciones. En Youtube, su canal Javier Miró: Recursos para escritores tiene cada vez más seguidores. Coautor y director del
Manual de Autopublicación de Autorquía, en abril publicará su segunda novela.
Libros prohibidos es un
proyecto dedicado exclusivamente a la literatura autoeditada.
Javier Miró, agente literario y escritor. Hasta
hace unos años se seguía la estructura tradicional del mercado editorial: un grupo
selecto y minoritario de autores intelectuales relacionados con la prensa
escrita, que propugnan que solo lo que ellos leen/escriben es lo que realmente
vale, y otro grupo mayoritario más relacionado con el Mass Media (cine, tv,
videojuegos, etc) que prefiere centrarse en vender libros aunque la calidad no
siempre sea una prioridad.
En los últimos años, a raíz de la gran crisis del
sector (a partir de 2012), los autores noveles han empezado a sufrir un mayor
rigor y dificultad de acceso a publicar en editoriales tradicionales. Y ahí es
donde aparece el boom de Amazon y la autopublicación. Entonces nos encontramos
con un panorama en el que a los dos grupos preexistentes se le ha sumado otro
grupo pujante, creciente, y tremendamente heterogéneo de autopublicados (más
relacionados con internet, las redes sociales, el crowdfunding, etc). Como
curiosidad, los tres grupos se rechazan entre sí.
Qué debe saber un autor
para autoeditarse
Lo
primero de todo es que va a tener que invertir una cantidad de tiempo muy
importante. Va a necesitar reservar, como mínimo un par de horas al día para
mover el libro, al menos durante un mes antes y el mes de después del
lanzamiento. También debe tener en cuenta que, al no tener un editor, necesita
buscar profesionales que le editen el libro. Estoy hablando de correctores,
maquetadores e ilustradores para la portada. Se pueden hacer muchos otros
trabajos pero esos tres son fundamentales para presentar un trabajo atractivo
al público. Como es lógico, para esto tendrá que invertir algo de dinero.
Es lector habitual de
autoedición, ¿hay talentos que deberían tener una mayor proyección fuera de
este ámbito?
Sin
duda, hay mucho buen escritor que, harto de no recibir respuesta de las
editoriales, se ha lanzado a la autopublicación para poder tener su obra al fin
en papel. En muchas ocasiones, se da el fenómeno de que el talento que atesoran
estos autores, al no ser pulido y trabajado convenientemente por editores
profesionales, termina desperdiciándose y sus libros no dan todo lo que podrían
ofrecer. Es uno de los grandes riesgos que estamos corriendo y que puede
afectar al mundo de la literatura en los próximos años.
Qué
aporta entonces, Libros prohibidos.
Libros
prohibidos es un escaparate para esto libros, autopublicados o publicados por
editoriales independientes, con pocos recursos. Nosotros entendemos que estos
libros publicados con tan pocos recursos no están tan condicionados por el
mercado, lo cual les da una libertad temática, estilística y conceptual que muy
difícilmente se puede encontrar en libros de los grandes grupos editoriales.
Esto los hace muy valiosos.
La
otra cara de la moneda es que sin promoción apenas tienen poder de difusión y
se pierden entre la vorágine. Como nos gusta decir a nosotros, quedan
prohibidos para el gran público. Ahí es donde entramos en acción nosotros,
dándole espacio a estos libros.
Por
supuesto que advertimos cuando un libro no está bien (de hecho tenemos cierta
fama de duros), pero eso es debido a que nuestro principal compromiso es con el
lector que va a invertir tiempo y dinero en estos libros. Hay que ser justos
con ellos, con los lectores, que, a fin de cuentas, son los que hacen posible
todo este negocio.
En la autoedición hay
un criterio que parece aún inflexible para que se fijen en ella: el éxito de
lectores pero muchos buenos escritores no son éxitos masivos de público.
Es
una muy buena pregunta; y complicada de responder también. Hoy en día hay miles
de personas rompiéndose los sesos para conseguir mejorar su posicionamiento y
así aumentar sus ventas. No hay fórmulas mágicas, aunque sí pautas de
comportamiento (me temo que demasiado complejas para desarrollar en unas pocas
líneas).
De todas formas, parece existir una especie de barrera entre los
autores minoritarios y el gran público. Cada uno mira hacia otro lado, como
fingiendo que no se importan, cuando en realidad es todo lo contrario. Y son
pocas las veces que se supera esa barrera (desgraciadamente, una vez que el
autor ya está muerto, como ocurrió con Bukowski o Foster Wallace, por citar un
par de ejemplos).
Alguna sugerencia para que las
presentaciones de libros sean por fin, algo fresco.
Por
supuesto, hay que huir de la presentación típica en la que uno o dos tipos
comienzan a cantar las alabanzas de una obra en concreto. Eso es cosa del
pasado y solo funciona con autores reconocidos o con libros de una temática muy
definida para un público también muy definido.
Yo
recomiendo a los autores salirse de ese corsé y organizar eventos atractivos,
dinámicos, donde se comparta el espacio dedicado al libro y al autor con
música, poesía, actuaciones, proyecciones, espectáculos de algún tipo,
performances, etc. Por supuesto, tendría que tener una unidad temática para no
despistar, y también debería de ser algo equilibrado (al fin y al cabo, lo que
se pretende es vender libros). Las colaboraciones entre autores y las causas
benéficas también ayudan.
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